Turismo express y gasolero en la costa argentina

Ya en vistas de concluir la primera quincena de enero se pueden sacar algunas conclusiones de cómo transcurre la temporada de verano en la costa argentina. Mar del Plata vive el verano con un público turístico poco superior al del año pasado en el mismo período, pero con un consumo ajustado y con un promedio de estadías de entre tres y cuatro noches.

El fuerte del turismo se concentra los fines de semana donde la ocupación hotelera se mantiene en un 70 por ciento y la expectativa para los próximos quince días es algo mejor. El clima sólo acompañó parcialmente volviéndose más inestable hacia el final de la quincena, lo que colaboró con otros sectores de la economía, algo más alejados de los balnearios.

«La actividad se viene concentrando en los fines de semana«, aseguraron desde la Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica quienes aseguraron que se incrementó en un 13% entre este fin de semana y el anterior, alcanzando el 83% de su capacidad de ocupación.

Desde la Cámara de Empresario de Balnearios, Restaurantes y Afines coincidieron en el diagnóstico señalando que»hasta ahora el momento la situación es similar al de la temporada pasada en los días de sol y los días de semana».

Los balnearios vienen trabajando con una ocupación de entre el 70 y el 80% en promedio y «claramente los viernes, sábados y domingos es cuando se registra el mayor nivel de concurrencia», detallaron.

Todos los rubros coincidieron «desde el jueves hasta el lunes la actividad repunta». «Hasta ahora los picos son del 70 por ciento y se producen los fines de semana. Hablamos de un turismo que está viniendo por tres, cuatro o cinco días, en algunos casos, una semana, a departamentos en el centro, contratados vía web y con anticipación en su mayoría» afirmaron desde el Colegio de Martilleros.

En cuanto al rubro gastronómico, el consumo es medido y se buscan opciones económicas, por eso, no todos los restaurantes están colmados de turistas, y se pueden buscar opciones, especialmente los días de semana donde baja el nivel de ocupación y demanda.