Los líderes de la CGT mantuvieron una reunión con empresarios y representantes del Gobierno y acordaron un bono para los trabajadores, que será convalidado por decreto, de $5.000 que se abonará en dos cuotas (una en noviembre y otra en enero de 2019).
También, en un cónclave en el que participaron el ministro de Producción, Dante Sica, y el secretario de Trabajo, Jorge Triaca, se conversó sobre un mecanismo para evitar despidos sin causas. Los miembros de la central obrera, en ese marco, plantearon la necesidad de reforzar las jubilaciones. “Vinieron los empresarios, sobre todo del sector industrial, comercio y construcción, planteando sus problemas. Nosotros planteamos los nuestros y la necesidad de atravesar una coyuntura que para muchos compañeros está por demás complicada para poder acompañar el proceso inflacionario tan grande”, sostuvo Héctor Daer, uno de los secretarios generales de la CGT, al finalizar el encuentro.
Luego, el greamialista agregó: «Si algún empresario tiene que despedir a algún trabajador, tiene que haber un paso previo en la secretaría de Trabajo y allí se discutirá si se puede resolver esa cuestión».
Desde Cambiemos creen que la posibilidad de que la CGT concrete un paro nacional quedó lejos. No obstante, los representantes sindicales dijeron que esperarán «la letra chica» del decreto de la Casa Rosada para descartar definitivamente la medida de fuerza.
«Tenemos que ver la letra chica de lo que tiene que elaborar el Gobierno. Así que cuando nos entreguen eso, ahí seguiremos conversando», señaló Acuña, uno de los secretarios generales.
