El mercado laboral de Estados Unidos mostró recuperación en junio, con caída del desempleo y creación de 4,8 millones de empleos. Estos datos se producen en medio de la pandemia del Coronavirus, que afectó gravemente la economía de la gestión Donald Trump.
No obstante, la tasa de desempleo todavía sigue en sus máximos históricos, registrados en octubre de 2009 (10%) y de diciembre de 1982 (10,8%). De esta forma, la tasa aún se sitúa en niveles sin precedentes desde que los registros comenzaron en 1948.
Por otro lado, el Departamento de Trabajo informó que hasta el pasado 27 de junio se registraron 1.427.000 peticiones de subsidio por desempleo y, sumando los datos de las últimas 16 semanas, la crisis generada por la pandemia afectó a 48.900.000 puestos de trabajo.
Hay más datos que ilustran la realidad del trabajo en el país norteamericano: la tasa de participación en el mercado laboral creció en siete décimas, hasta el 61,5%, y la población activa creció en 1.700.000 personas.
Por grupos de trabajadores, la tasa de desempleo entre las mujeres se redujo hasta el 11,7%, casi tres puntos menos, mientras que entre los hombres descendió hasta el 10,6%, lo que equivale a un punto y medio porcentual menos. Entre los jóvenes se redujo hasta el 23,2%, desde el 29,9% del mes de mayo.
Desde la Reserva Federal se entusiasmaron con las cifras y expresaron que la economía “había entrado en una nueva fase importante y antes de lo esperado”. Pero Powell advirtió que la perspectiva “es extraordinariamente incierta” y dependería de su éxito para contener el virus.
