En Chile, continúa la medida de fuerza que ordenó el sindicato de trabajadores de las minas de cobre Escondida y Spence de la BHP.
El gremio, de 200 miembros que opera el Centro de Operaciones Integradas de BHP, pide que la empresa cese con los despidos y mejore las condiciones laborales. “Se han presentado denuncias ante la Dirección de Trabajo por violar las prácticas de huelga y antisindicales”, dijo el secretario Robert Robles, quien anticipó que realizarán en la próximas semanas nuevas manifestaciones en Santiago.
Además, recibieron el apoyo del gremio de obra en Escondida, un colectivo sindical fuerte que criticó las recientes reformas laborales que permitieron a las empresas reemplazar temporalmente a los trabajadores durante las huelgas.
El paro, que afecta a Escondida, la mina de cobre más grande del mundo, comenzó el jueves y generó incertidumbre sobre el suministro global de metal rojo luego de los esfuerzos para contratar trabajadores para lidiar con la administración de la empresa.
Ante este escenario, BHP no respondió acerca de los cuestionamientos que posee ni sobre el estado de sus operaciones.
