Representantes de la Confederación General del Trabajo (CGT) se reunieron en esta semana con algunos diputados nacionales para intentar acordar una estrategia común contra el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70 que impulsa el Gobierno de Javier Milei. En ese marco, dirigentes gremiales se encontraron este martes con Miguel Ángel Pichetto y Facundo Manes, legisladores de bloques más afines con el Gobierno, coincidiendo con ambos en el rechazo al DNU y a la reforma laboral por decreto.
Antes de estas reuniones con representantes de la oposición “amigable” con el Gobierno, la CGT ya había sostenido la semana pasada encuentros con legisladores peronistas y con el ex ministro de Economía Sergio Massa, para consensuar acciones contra el DNU. En el mismo sentido, este miércoles el plenario de regionales cegetistas votó llevar a cabo “reuniones con los legisladores representantes de cada jurisdicción provincial a los fines que acompañen con el voto lo que se mantiene con el discurso comprometido en cada lugar desde donde provienen”.
Masivo plenario de regionales cegetistas para acordar acciones hacia el paro del 24
El lunes de esta semana, la central obrera había también emitido un comunicado donde se le pedía al presidente de la Cámara de Diputados ser incorporados al debate en el Congreso: «Esta Confederación General del Trabajo ha expresado públicamente preocupación por la magnitud del proyecto. La intención es compartir nuestra visión en los distintos temas en las Comisiones que den tratamiento al proyecto de ley”.
En Diputados comenzó a debatirse este miércoles la Ley Ómnibus («Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos»), con la presencia del ministro del Interior Guillermo Francos y de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quienes defendieron ante los legisladores la iniciativa oficialista, con momentos de durísimos intercambios y críticas con los legisladores opositores de Unión por la Patria o del Frente de Izquierda.
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El cosecretario cegetista Héctor Daer comentó al respecto desde sus redes sociales: “La nueva ley «ómnibus» nos retrotrae a 1791, a la época de la represión de la libertad sindical en la Revolución Francesa. Criminalizar la reunión, imponer notificaciones y responsabilidades excesivas es un paso atrás. Un retroceso grave en nombre de la libertad”.
