El consumo masivo se desplomó un 3,3% a causa de la inflación

Con la suba de precios, en octubre, las ventas en los supermercados y comercios tradicionales, continuaron en picada. Se desplomaron 3,3% respecto del mismo mes del año pasado y acumulan, de esta manera, una caída del 1% en forma interanual.

La evolución del consumo masivo que relevó la consultora especializada Scentia y fue expuesto -ayer- en una jornada organizada por la Asociación de Supermercados Unidos ASU), en la Rural, muestra a través de sus informes una fotografía de la compleja situación.

Los empresarios vinculados a las grandes cadenas de supermercados se reunieron para escuchar a los analistas que pusieron en estadísticas (poco auspiciosas) los datos que ellos comprueban todos los días en sus centros de venta.

Los datos que conciernen no sólo a la evolución del negocio supermercadista durante este año, sino también a los pronósticos a futuro indican una lejana recuperación que podría llegar recién en el último trimestre del 2019.

Empresarios como Alfredo Coto, Federico Braun, de La Anónima; Agustín Beccar Varela, de Walmart Argentina; Jean Cristophe Tijeras, de la cadena Libertad y Rami Baitieh, de Carrefour Argentina participaron de un panel que se llamó «Adaptarse a tiempos complejos».

El director de Scentia, Osvaldo del Rio, definió la situación como “muy compleja” al iniciar su presentación sobre «Niveles de Ventas en tiempos de crisis». Y a través de un gráfico sintetizó cómo cuando las curvas de la inflación y del ingreso se bifurcan, automáticamente ven afectado el consumo. El promedio del aumento de precios en los supermercados, medido por la consultora asciende al 31,7% hasta septiembre y al 35,7% en el comercios tradicionales.

El consumo viene cayendo desde julio y ya en el último bimestre agosto-septiembre se aceleró pronunciadamente hasta marcar una «caída del 4,6%”.  No sólo se puede analizar la el desplome sino el cambio hacia otros rubros u opciones. “Lo que podemos ver es que los consumidores están cambiando a marcas más económicas y segundas marcas; en todas las familias de productos, las segundas marcas a buen precio se imponen sobre las premium”, cuentan desde la consultora.

Para los autoservicios , la caída de las ventas fue menor y alcanzó un 3,1% en octubre, pues allí las compras son más pequeñas y frecuentes y con productos que se encuentran a más bajo precio». Esto se da porque, según el analista, «ya hay familias de productos que están en niveles del 50% de incremento de precios como aquellos de la canasta básica, alimentos congelados y productos de higiene».

A la hora de las conclusiones hubo algunas disidencias en cuanto al tiempo de recuperación. Alfredo Coto, recién llegado de China, fue uno de los más optimistas entre los supermercadistas. Dijo que «van a venir entre 4 y 6 meses duros» y que espera el repunte de las ventas hacia el segundo semestre de 2019.

Por su parte, Darío Brasca, segundo de la cadena cordobesa Cordiez, la consultora EcoLatina y Kantar Worldpanel  opinaron que «el año próximo va a ser muy duro». «El plan de deficil fiscal cero que está llevando adelante el Gobierno va a repercutir fuerte en el consumo», comentó, señalando como más extenso el período de bajo consumo porque este año fue mucho más duro de lo esperado y no hay reglas claras al momento de reactivar las propuestas frente a las demandas”.