Luego de la decisión de dejar de fabricar autos en su planta de Campana, provincia de Buenos Aires, y dedicarse solamente a ensamblar motos en el país, Honda planea cerrar concesionarias en el marco de su plan de reajusta de negocios. A su vez, en la mencionada locación, ya dispuso de 400 retiros voluntarios para achicar personal.
Actualmente, la firma, que dejará de fabricar vehículos y aumentará importaciones, planea quedarse con 18 concesionarias de las 27 que posee, lo que significará una notable reducción de puestos de trabajo. También, planea comercializar la mitad de las unidades que tuvo en el mercado en los últimos años (entre 4 mil y 5 mil unidades). En este escenario, SMATA, el gremio que representa a los empleados, interviene en el proceso para evitar un conflicto de envergadura.
Según explicaron desde Honda, la producción no cesará inmediatamente en la planta de la localidad bonaerense de Campana, que tiene unos mil empleados sobre todo abocados a la producción del SUV H-RV, sino que se irá reduciendo hacia 2020.
El objetivo principal de la instalación de Honda en Argentina tenía que ver con la exportación hacia Brasil, que en los últimos años también entró en una fuerte recesión, lo que llevó a colocar 70% menos unidades que las que se esperaban. También incide en la ecuación la fuerte caída de ventas en el mercado local argentino y la baja de competitividad local.
«Es una decisión que se tomó en Japón, hace meses que se viene haciendo un análisis global. En febrero, se decidió que desde el 2021 se dejará de fabricar autos en Inglaterra y Turquía. Se dio una aceleración de cambios tecnológicos en la industria y decidieron concentrarse en la producción de motos en la Argentina. No hay otros cambios similares en la región, la HRV se continuará fabricando en Brasil y México, no sabemos de dónde las importaremos en 2021», explicó Santiago Di Pardo, gerente de Relaciones Institucionales de Honda.
