Ante el gran brote de Coronavirus, las automotrices de Brasil más importantes decidieron suspender la producción. La gran cantidad de empleados contagiados imposibilitan la actividad, expresaron desde Mercedes-Benz, Volvo, Scania, Nissan, Renault, Toyota y Volkswagen.
“El personal está bastante preocupado. La mayoría ya perdió parientes, amigos, inclusive colegas del trabajo”, dijo el coordinador del comité sindical de Mercedes-Benz en Brasil, Max Pinho, que remarcó que en los últimos meses intensificaron los cuidados, el respeto a los protocolos, pero no alcanza ante un descontrol generalizado.
La única empresa, de las más importantes, que marcó distancia fue General Motors: “Nuestros protocolos demostraron ser eficientes en la prevención de contagios. Las investigaciones internas muestran que nuestros trabajadores se sienten más seguros en las fábricas que en sus propias casas. Por eso no vemos un motivo que nos lleve a alterar nuestro cronograma de producción en este momento”, señalaron de GM.
El SATSAID continúa en estado de alerta por los despidos en Directv
El primer fabricante de autos que anunció el cierre provisorio de sus cuatro plantas brasileñas fue Volkswagen. Desde el pasado miércoles suspendió los complejos de São Bernardo do Campo (SP), Taubaté (SP), São Carlos (SP) y São José dos Pinhais (PR) al menos por doce días. Sólo se mantendrán las actividades esenciales con personal administrativo que realizará las tareas desde su casa.
Toyota tomó la decisión de adelantar feriados y volver a la actividad en los próximos días, si los testeos de su personal da negativo. Nissan, por su parte, le dio vacaciones a todo el personal del polo industrial de Resende, Rio de Janeiro, hasta el 12 de abril. Renault cerró la planta de Paraná entre el 29 de marzo y el 4 de abril. Mercedes-Benz hizo lo mismo y piensa retomar la producción a fines de esta semana.