Los trabajadores de la Ruta 7 de Junín denunciaron, una vez que finalizó el acto de inauguración en el que participaron Mauricio Macri y María Eugenia Vidal en el lugar, que existieron despidos. Por eso, en señal de protesta, tomaron el obrador situado en el paraje La Agraria.
Desde la Uocra, gremio que representa a los empleados, confirmaron que las empresas contratistas, tras el acto del jefe de Estado y la Gobernadora, echaron a 40 trabajadores, un tercio de la plantilla. Un obrero dijo que al mismo tiempo que se preparaba la inauguración de la obra también «estaban preparados los telegramas». «Hoy estamos tomando medidas de fuerza para que reincorporen al personal”, aseveró.
Por otro lado, señaló que se apuraron los tiempos y la obra no está en óptimas condiciones: “La obra que se inauguró puede traer muchos inconvenientes a la seguridad vial por la forma en que se empalmaron las dos calzadas y cómo está señalizado. Está todo de manera precaria”.
En la actualidad, todos los empleados “estamos ocupando el obrador para tratar de lograr que algún tipo de negociación y se reincorporen” a los que echaron, comentó. “Queremos que devuelvan el trabajo, que es lo que les sacaron de un día para el otro”, remarcó.
Vale destacar que el tramo de la Ruta 7 que el Presidente inauguró fue licitado en el año 2015 por 727 millones de pesos en 2015. Pero, cuando comenzó la gestión de Cambiemos, se autorizó un rediseño que llevó el valor a 1049 millones y hasta ahora se pagaron 4.272 millones.
