Los supermercados La Anónima despidieron a 49 trabajadores en sus sucursales de Río Grande y Ushuaia, en la provincia de Tierra del Fuego, según confirmó el secretario Adjunto del Centro Empleados de Comercio de Río Grande, Daniel Rivarola.
Según el dirigente, ya van 18 desvinculaciones en las sucursales de Río Grande y otras 31 en Ushuaia. A nivel nacional, ya sumarían cerca de 200 los despidos concretados por la empresa. Resaltó que “esto se debe a un achique de la empresa por la cuestión económica que atraviesa el país”. Rivarola además aclaró que desde el gremio “no podemos hacer nada, dado que en todos los casos paga dentro de las 48 horas el 100% de las indemnizaciones a los trabajadores despedidos”.
El gremialista destacó que “la empresa tiene un total de 320 empleados aproximadamente en Río Grande, lo cual genera impotencia porque uno no puede avanzar en un reclamo, siendo que en 48 horas abona las indemnizaciones, pero da bronca la incertidumbre, y la situación que le queda a los compañeros que están todavía en relación de dependencia, y se genera una situación de inestabilidad para todos”.
En cuanto a los pasos a seguir, Rivarola anticipó: “La idea es poder hablar con los delegados primero, y en virtud de esto veremos cómo avanzamos con la empresa, sabiendo que esta situación que se está viviendo pone a todos los empleados en una situación de trabajo no salubre, siendo que muchos jefes se aprovechan de esto, y toman algunas medidas de apriete como diciendo ‘flaco laburá más porque sino te toca a vos’, por lo cual yo quiero cortar con esto por lo más sano, quiero que nos planteen el plan que tienen, planteémoslo, pongan toda la plata arriba de la mesa, y córtenla, dado que el resto de los trabajadores tienen que trabajar normalmente”.
Por último, insistió con que “no se pueden tomar medidas gremiales porque la empresa está cumpliendo con la ley como corresponde, por lo cual no se puede decir nada, están cumpliendo con lo que marca la ley de contrato de trabajo, te ponen la indemnización arriba de la mesa, y en 48 horas la gente está cobrando, y si por ejemplo te toca cobrar 100 pesos, a veces te ponen 101 pesos, con lo cual tampoco hay posibilidad de discutirle que pague como corresponde, lo cual también genera impotencia porque ves cómo se está desmoronando todo por culpa de una economía que nos está destrozando desde todos los puntos de vista”.