Fernández instó a la CGT a no hacer «pedidos desmedidos» en las paritarias

El presidente Alberto Fernández confirmó este jueves que en los próximos días se anunciará el monto del bono que las empresas deberán pagar como anticipo de las negociaciones paritarias de inicios de año pero, si bien le pidió a los empresarios que “no se abusen”, también aprovecho para enviar un mensaje a la Confederación General del Trabajo (CGT) en el sentido de que no haya “pedidos desmedidos”.

“Queremos que las paritarias funcionen, pero queremos garantizar un aumento mínimo, para que los empresarios no se abusen. Y también, a los que trabajan, que tengamos en cuenta la situación y no hagamos pedidos desmedidos”, detalló Fernández en declaraciones radiales. Y explicó que “todo repercute finalmente sobre el resultado de la economía”, por lo que “todos tenemos que ser cuidados”.

Esta semana, Carlos Acuña, uno de cotitulares de la CGT había pedido que los aumentos salariales superaran la evolución de los precios al consumidor: “Gradualmente, que el salario vaya recuperando por encima de lo que es la inflación”.

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El adelanto paritario, que se establecerá por decreto, estarían entre 6 y 9 mil pesos, según trascendió. Probablemente estaría exento del pago de aportes y contribuciones patronales, aunque sí sumaría para ítems como aguinaldo, indemnizaciones y vacaciones.

“Tenemos, por estadística, un arrastre de caída importante (previsto para este año). Pero estamos trabajando para que pare de caer. Estoy trabajando para recuperar los superávit gemelos. Sería una primera tranquilidad que el Estado no gaste lo que no tiene. Pero para llegar a eso hay que hacer lo que estoy haciendo porque si no es imposible. Tenemos que inducir a la gente a que consuma”, detalló en cuanto a las perspectivas económicas del Gobierno. Luego denunció que el FMI “tiene mucha responsabilidad en lo que pasó” porque “le prestaron plata a alguien que sabían que no iba a poder devolverla para que pudiera ganar una elección y ocultar el problema”.

Fernández también anticipó medidas en relación con los créditos UVA: “Me hace acordar mucho a lo que pasó en salida de la convertibilidad, con gente que quedó enganchada en deuda en dólares. En aquel momento el tema llegó a la Corte Suprema, que planteó el principio del esfuerzo compartido. Es decir: pasó algo que ni el acreedor ni el deudor habían previsto. Entonces los dos tienen que hacer un esfuerzo. Con el tema de los UVA estamos trabajando bajo esa lógica, buscando que los mecanismos de incrementos sean sensatos. “Como no tenemos todavía la solución para el tema, decidimos prorrogar un mes más el congelamiento. Pero estén seguros de que el sistema tal como estaba funcionando no va a volver”, anticipó.

En cuanto al acuerdo con supermercadistas, explicó: “Tenemos detectado un aumento de precios no justificado económicamente en los últimos meses. Como aumentaron los precios sin ton ni son, les pedimos que absorbieran ellos ese 21 por ciento. Gracias a Dios se pusieron de acuerdo y logramos esto: por ejemplo, que la leche tenga cero aumento. Los demás alimentos tendrán aumentos promedios de entre el 7 y 10 por ciento”. Y agregó: “Esta política hay que seguirla, porque en la Argentina se construye inflación por expectativas de un modo peligrosísimo. Como el Gobierno anterior dijo que si ganábamos nosotros era el caos, muchos empezaron a aumentar. Son aumentos que tienen muy poca razón de ser. ¿Por qué si el consumo cae los precios aumentan? ¿Por qué aumentó el dólar? Si en los alimentos insumos en dólares prácticamente no existen. Los empresarios tienen una tendencia a construir inflación solamente por expectativas. Es la inflación psicológica”.

En ese sentido, rescató el relanzamiento del programa Precios cuidados: “Vamos a cuidar a fondo que eso no se rompa, porque parte del éxito que queremos es lo que Martín Guzmán llama ‘que se tranquilice’ la economía: salir de esta zozobra de no saber a dónde se van a ir los precios. Es imposible vivir así, más aún cuando no hay causas que lo justifiquen. Si la demanda cae, los precios tienen a bajar. Bueno, en la Argentina pasa lo contrario. Hay algo que está funcionando mal. Lo que más quiero es que los supermercados, los minimercados, los chinos y el almacén vendan y ganen mucho, pero para lograr eso necesitamos gente que pueda comprar alimentos”.

Fernández también analizó las reacciones de la Mesa de Enlace en torno a las retenciones y planteó que “no participaron” del pacto social que impulsa el oficialismo: “Dijeron que iban a necesitar más tiempo para analizarlo institucionalmente. Confío en que lo analicen y se sumen. No quiero que queden excluidos porque ellos también tienen que ver con la suerte de la Argentina. Siempre tienen las puertas abiertas. También es justo decir que Coninagro y Federación Agraria, que son parte de la Mesa de Enlace, enviaron notas adhiriendo al encuentro. Creo que de su parte hay una suerte de prevención a partir de la experiencia de la 125. Sienten que el Gobierno quiere agredirlos, pero el Gobierno quiere sumarlos”.

Finalmente, el mandatario remarcó la importancia del pacto social: “Hicimos algo muy importante que mediáticamente pasó desapercibido. Fue inédito: es la primera vez que empresarios, trabajadores y el Estado se juntan para decirles a los acreedores que creemos que la fórmula para pagar no pasa por seguir ajustando la economía argentina, sino hacer que la Argentina crezca”. Y concluyó: “Fue un mensaje muy contundente para el Fondo y los acreedores, que tomaron nota. Fue casi fundacional en una lógica de cómo encarar nuestras obligaciones. Sirvió de mucho”.