El ministro de Economía Nicolás Dujovne reconoció públicamente la difícil situación que atraviesa el país y anticipó que el escenario puede extenderse todavía durante un buen tiempo, pero destacó la figura del presidente Mauricio Macri como “piloto de tormentas” que está logrando “avanzar con las medidas que hacían falta para acelerar el camino hacia un equilibrio fiscal”.
Dujovne también admitió que, pese a la difícil situación que están atravesando la producción nacional y los sectores más vulnerables de la sociedad, no se prevé ningún tipo de ayuda extraordinaria para los jubilados y pensionados o algún tipo de programa de reactivación de emergencia para la industria.
En entrevista con Radio La Red, el funcionario analizó el nuevo sistema de flotación del dólar entre bandas implementado por Guido Sandleris al frente del Banco Central y opinó que este lunes “fue un buen día para empezar”. “El sistema funcionó; se hizo una primera licitación de las letras de liquidez que emite el Banco Central para ir retirando pesos. Fue un día de estabilidad cambiarla”, destacó.
La política oficial pasa por “secar” el mercado de pesos para que no puedan irse al dólar y así evitar que la moneda siga subiendo, para lo que se apostó a tasas insólitas de hasta 72% para las Leliq. En el corto y mediano plazo esto profundizará la recesión económica, agudizando la crisis económica de las empresas, que ya tienen una cadena de pagos totalmente quebrada y enormes dificultades para acceder a créditos bancarios. La única medida que pudo mencionar a favor de las PyMEs fue la de programas crédito con “tasas subsidiadas” del Ministerio de la Producción.
En el mismo sentido, descartó la posibilidad de aprobar un “bono-ayuda” para jubilados ya que lo consideró innecesario porque las jubilaciones se ajustan por inflación. “Realmente no es que no seamos sensibles a la situación de cada uno de los grupos que están afectados, pero el presupuesto no es infinito; hay prioridades y tenemos que ir viendo, paso a paso, cómo las asignamos”, afirmó.
En cuanto al freno total a la emisión de pesos, que se mantendría “hasta junio del año que viene” insistió: “Queremos ir reforzando el concepto de que la base de una moneda sana y la estabilidad cambiaria vienen de la mano de la fortaleza del peso y no de una política de intervención. Eso da una certidumbre a los que tienen pesos que los pesos que hay circulando siempre son los mismos. Eso tiende a fortalecer la moneda después de meses de volatilidad”.
Respecto la caída de la actividad económica en general, tanto en la producción como el consumo, reconoció que “estamos atravesando una recesión”, que justificó por la sequía que sufrió nuestro país y la volatilidad económica internacional, además de crisis políticas internas como la desatada por “los cuadernos” y anticipó que la economía “va a estar en recesión por un tiempo”. “Lo importante es que tenemos un piloto de tormentas, el presidente, que realmente con mucha valentía ha decidido avanzar en la medidas que hacían falta para estabilizar la situación, que es acelerar el camino hacia el equilibrio fiscal, por eso la Argentina tiene hoy un proyecto de ley de presupuesto para el año que viene con equilibrio fiscal primario”, agregó.
Luego insistió: “Nosotros sabemos que tenemos meses duros por delante, así como han sido meses duros los meses que hemos atravesado desde abril. Pero también sabemos que sin esas medidas hubieran sido mucho más duros; que hemos logrado evitar una crisis. Estamos atravesando una recesión que es dura y difícil, pero manteniendo las reglas de juego con las que entramos en este proceso”.
