Culmina un año en el que el cierre de locales comerciales alcanzó un récord por el desplome del consumo, producto de la severa pérdida de poder adquisitivo de los salarios. Como parte de ese panorama, la cadena Musimundo confirmó el cierre de otros tres locales, después de los diez en los que ya había bajado persiana hace unos meses.
En el mes de mayo Musimundo había anunciado el cierre de diez de sus puntos de venta (nueve en el interior del país y la sucursal de Corrientes y Callao, en el centro porteño). En lo que va de la gestión Cambiemos, la cadena cerró 30 locales. Este jueves se anunció el cierre de otras tres sedes emblemáticas: la del Abasto Shopping, la del shopping de Liniers y la en Caballito.
Musimundo abrió su primer local en los años 70, especializándose en música y en los 90 comenzó a difundirse por todo el país, ampliando su oferta de productos a libros, electrónica e informática. En 2011, luego de la venta a algunos licenciatarios de la cadena Megatone (integrado por Electrónica Santa Fe y la empresa chaqueña Carsa), también incorporó la venta de electrodomésticos. Al momento de la venta, la marca poseía 45 locales y también se logró un gran crecimiento de sus canales online, llegando a las 264 sucursales.
Las primeras diez sucursales que cerraron este año fueron las vinculadas a Carsa (mientras que el cierre de los tres locales anunciados este jueves responden a la decisión de Electrónica Santa Fe), que terminó presentándose a concurso de acreedores en junio de este año, logrando reestructurar una deuda de 4 mil millones de pesos con bancos e inversores.