Córdoba: Fittipaldi, el dirigente que puede convertirse en el líder de la CGT

La conducción de la CGT de Córdoba puede tener una nueva cara a partir de noviembre: se trata de la de Sergio Fittipaldi, el dirigente de 41 años que lidera del Sindicato de Obreros y Empleados de Limpieza y Servicios Afines de Córdoba (Soelsac) que posee 23 mil afiliados.

Si bien existen otras corrientes gremiales que aspiran a liderar la central obrera, Fittipaldi se muestra con «humildad» y mesura e esta instancia. Por otro lado, también considera que debe existir consenso con el ala que conduce José Pihen, actual secretario general de la CGT de Córdoba.

Para el dirgente de Soelsac, «esta CGT que se viene para empezar tiene que tener consenso con el gobierno provincial. En el caso particular mío, lo tengo, tengo muy buena relación con el Gobierno. El Gobierno de Córdoba ha hecho muy buen trabajo, lo veo al viajar a otras provincias porque Córdoba no sintió el cimbronazo de esta situación que hoy está viviendo el país».

Desde su visión, la gestión de Schiaretti al frente de la provincia «se manejó muy bien en nuestro ámbito territorial que es Córdoba». «Sé que la CGT que venga se va a tener que sentar y consensuar con Schiaretti, que tiene un buen panorama para los trabajadores. Córdoba salió casi ilesa de la situación que vivió el país».

También se mostró esperanzado con la llegada de Alberto Fernández a la presidencia, si es que se impone en primera vuelta el próximo 27 de octubre: «Viene un gobierno de Alberto, pienso que él va a poner mucho énfasis en los sindicatos, en el sentido de la fuente laboral, en las convenciones colectivas de trabajo; yo creo que Alberto va a ser de un estilo como cuando empezó Néstor (Kirchner) que se fijó mucho en la clase trabajadora y en las necesidades del pueblo argentino».

Fittipaldi aseguró que plantea «la unidad del movimiento obrero, sería bueno que se llegue a un consenso ahora para formar una CGT que incluya muchos sindicatos. Busco la unidad y el consenso con las otras entidades sindicales que actualmente están hoy en la CGT, sumada a las 30 y pico de entidades que conformamos las 62 Organizaciones Peronistas».

«Tener un movimiento obrero organizado fuerte no se hace con 10 gremios, si tenés 100 gremios en Córdoba, estaría bueno tener una CGT al menos con 50. Así sería diferente la CGT porque estaría agrupando muchos sindicatos y muchos trabajadores. Se va a ocupar de la realidad de todo el ámbito laboral y no de algunos sectores», estableció.