El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a cargo de Horacio Rodríguez Larreta instaló contenedores “inteligentes”, que se abren solo con tarjetas magnéticas, sobre la avenida Corrientes con el fin de evitar que la basura se saque. Algo que claramente perjudica a los trabajadores cartoneros y a personas que revuelven los desechos con el objetivo de comer.
Eduardo Macchiavelli, ministro de Espacio Público de la Ciudad, indicó sobre la novedad: “Esto es para evitar que se la gente se meta y saque basura. Y así va a mejorar mucho la limpieza de la avenida”, aseguró. Los nuevos “contenedores easy” se abren luego de apretar un un botón y apoyar la tarjeta magnética en un lector. Una vez que se cierra, la tapa del tacho queda bloqueada, según se pudo ver en un video que difundió la administración Larreta.
Si bien los receptáculos magnéticos fueron instalados sólo en la avenida Corrientes, Macchiavelli aseguró que probablemente extiendan la iniciativa al resto de la ciudad. Juan grabois, representante de CTEP, criticó la iniciativa: «Los contenedores inteligentes de la Ciudad van a durar 10 minutos. La gente los va a romper por desesperación para comer. Al que se le ocurrió la idea es un imbécil», sentenció.
En tanto, las cooperativas de cartoneros que operan en la ciudad de Buenos Aires tomaron la medida como un ataque directo: «Estos contenedores son un ataque al trabajo de los miles de cartoneros que buscan material para reciclar y es, a la vez, una medida totalmente discriminatoria que busca esconder el problema de la pobreza en lugar de resolverlo», señalaron las cooperativas El Álamo y El Ceibo.