El gobierno nacional comenzó este miércoles a distribuir entre las provincias más de 900 mil dosis de la vacuna Moderna contra el COVID-19 que serán aplicadas en los menores de 18 años con factores de riesgo, mientras se avanza con la producción local de vacunas Sputnik V del componente I y II en los laboratorios Richmond.
En ese aspecto, la ministra de Salud Carla Vizzotti y sus pares de las 24 jurisdicciones mantuvieron una reunión del Consejo Federal de Salud (COFESA) en la que se terminó de acordar el comienzo de la inoculación de los adolescentes que tengan entre 12 y 17 años.
Al término del encuentro Vizzotti anunció que desde este miércoles las provincias abrirán el registro para dicho grupo etario con factores de riesgo que serán incluidos en el Plan Estratégico de Vacunación para recibir dosis de Moderna. La Argentina cuenta con tres millones y medio de vacunas de ese laboratorio donadas por Estados Unidos.
La titular de la cartera sanitaria informó que ya están disponible en una webinar las condiciones definidas junto con la Sociedad Argentina de Pediatría “para que los y las pediatras puedan saber cuáles son las condiciones priorizadas para iniciar esta vacunación”.
En el Gobierno estiman que el 22% de los adolescentes de entre 12 y 17 años cumplirán con estos criterios patológicos, con lo cual se tratarían de poco más de 900.000 jóvenes que requerirán 1.800.000 dosis de Moderna para completar el esquema de vacunación. El intervalo de aplicación entre el primer componente y el segundo es de 28 días con esta vacuna.
Al mismo tiempo, Vizzotti anunció la “disipación” del conflicto con el laboratorio Pfizer y la compra de 20 millones de dosis que llegarán en el corto plazo al país, en el intento de despejar dudas y requerimientos por parte de la oposición sobre un tema que tomó dimensiones políticas impensadas.
Lo cierto es que paralelamente se espera una partida masiva a nivel local de fraccionamientos en el país que puedan multiplicar dosis y sobre todo reemplazar el componente II de la vacuna rusa que se encuentra en faltante. Se estima que podría ser un millón mensual, según la capacidad de la planta con la que actualmente cuenta Richmond.