El ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires dictó la conciliación obligatoria en el conflicto con la empresa de zapatillas Paquetá, que se ubica en Chivilcoy. La medida fue establecida hasta el 27 de noviembre e implica que la compañía no podrá realizar despidos y que los empleados no deberán llevar a cabo medidas de fuerza.
La firma, con 600 trabajadores, comenzó a tener problemas el año pasado y, tal como explicó el intendente de la localidad, Guillermo Britos, decidió cerrar sus puertas en este 2018 «porque Adidas no le compra más» ya que decidió importar los productos que se hacían en Chivilcoy. «Va a indemnizar a todos los trabajadores con el 140 por ciento y el 31 de diciembre anunció que al que no aceptó la indemnización, lo despide”, añadió.
El mandatario también dejó en claro que se encuentra en la búsqueda de reconvertir la fábrica y que el predio será otorgado a la empresa que menos trabajadores despida. “La empresa para conservar la nave debe mantener una cantidad de empleados que está estipulada en el convenio que se firmó con el Municipio, y de ninguna manera, se quedará con el predio si no cumple con lo establecido”, afirmó.