El impuesto a las grandes fortunas es un proyecto que, con varios meses de demora, por fin se está tratando en el Congreso Nacional. Desde el bloque lavagnista, Consenso Federal, que integra la cámara baja, Alejandro Topo Rodríguez afirmó en Estado de Alerta que en principio “mi posición se inclina a aprobarlo” pero esa aprobación está sujeta a “que se considere destinar buena parte de lo que se recaude a PyMes, a sostener la inversión productiva y el empleo genuino”.
El proyecto, inspirado en una visión solidaria que va a alcanzar en el máximo de su alícuota, a sólo 300 personas que tienen más de tres mil millones de pesos, y lo mínimo de su alícuota, que se aplica a personas que tienen más de 200 millones de pesos, alcanzará en total a unas 12 mil personas sobre 45 millones de argentinos, algo que Rodríguez analizó como un proyecto que “vale la pena analizar como para acompañarlo”.
En ese sentido, consideró natural que algunos se opongan y también que lo vean como un “impuesto” porque en “realidad lo es”, opinó, ya que “la administración pública y las políticas públicas se sostienen a través de contribuciones que no son voluntarias”, porque sí así fueran seguramente “todos tendríamos un incentivo a ponerlo en otro lado y no en el servicio común”, justificó.
Asimismo insistió en que “es importante que una parte de esta recaudación vaya a sostener el empleo genuino, el trabajo; también va a ir a inversiones en el sector del gas, a los barrios populares, a la financiación del Progresar”, lo que consideró como “finalidades más o menos compartidas por un conjunto importante de la sociedad”, lo que habla de consensos, algo en lo que insistió el diputado tandilense.
Consultado sobre el gesto de solidaridad que se espera de la política manifestó: “me parece bien que la sociedad exija y que nosotros demos muestras de austeridad en primer lugar, si hay que hacer recortes también”. A lo que agregó: “nosotros lo propusimos hace ya muchos meses por escrito cuando “el campeón de los amagues, que es Sergio Massa” insinuó que lo iba a bajar, pero finalmente no recortó nada y nos dejó pagando pero no nos cobró”, ironizó el legislador.
Paralelamente, Rodríguez adelantó consideraciones sobre el proyecto de Presupuesto para el siguiente año que acaba de ingresar al cuerpo, al que para aprobar, aseguró “le exigirán que incluya una mirada federal en la distribución de los recursos, una mirada atenta a la provincia de Buenos Aires, históricamente relegada en la distribución de los recursos federales, y a la producción y el empleo, como columna vertebral de los esfuerzos tributarios de la Argentina”.
Audio completo – Estado de Alerta – AM770- Radio Cooperativa
Como mano derecha de Roberto Lavagna, el ex ministro de Economía clave en el despegue de la Argentina luego de la crisis del 2001, señaló que su mirada sobre lo que está ocurriendo en materia económica éstos días “no lo hace pesimista respecto del mediano plazo”. Al respecto sugirió que “se deje de hacer tanto ruido político”, porque «en términos objetivos Argentina tiene capacidad de recuperación económica».
Respecto a la “quita” de coparticipación a la Ciudad para cerrar el conflicto policial expresó que “a mí no me gusta que ningún Presidente calque o copie los guadañazos de Macri, no son las formas”, condenó. “A mí me parece que se podría haber llegado de la misma manera con mucho más consenso”, y dijo que “la Nación podría haber adelantado transitoriamente una X cantidad de dinero durante algunos días o meses mientras realizara un trámite “razonable, sereno, de equilibrio para llegar al mismo objetivo por otro método”, aseguró.
Por último, consultado por la reforma judicial, donde la posición de Consenso Federal es clave, señaló que, pese a tener media sanción, su tratamiento “todavía no tiene una fecha en la Cámara de Diputados”, pero en su opinión “cuanto menos se le ocurra al Gobierno tratarla mejor, porque ese proyecto viene mal y termina mal, no va a ser aprobado en la Cámara de Diputados”, anticipó el diputado.