La ministra de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, reconoció cierta la disputa entre economía y salud y dijo a Estado de Alerta que «es una dicotomía sobre la que hay que cabalgar y resolver» pero admitió que siempre «teniendo claro lo que plantea primero el Presidente de la Nación y después el Gobernador, la prioridad es la salud, por lo tanto todo el esfuerzo está puesto en reforzar el sistema sanitario» para cuando ocurra el tan temido pico.
Respecto a la gran preocupación existente sobre una explosión en el conurbano debido a la crisis agudizada por la pandemia «reconoció que el aislamiento allí es sumamente difícil», por tener una población muy vulnerable ubicada en barrios y en localizaciones muy precarias donde se hace muy difícil el aislamiento familiar. «La convivencia de los chicos con los abuelos es una constante en las barriadas más humildes y además es la concentración urbana más grande del país; así que toda la atención del Presidente y toda la atención del Gobernador están puestas ahí» afirmó la funcionaria.
«Ahora parece que estuviera ausente en el mensaje permanente sobre los cuidados en la salud, sobre todo porque algunos medios de comunicación han puesto la mirada y la energía en el manejo de la economía como cuestión central y nos estamos olvidando del cuidado de la pandemia» recriminó García.
Luego en materia económica señaló que «va a haber algunos lugares que pidan abrir algunas de las actividades, porque además tiene que ver con cadena de valor» y puso como ejemplo la producción del 90% de los calefactores e insumos para la calefacción ya que llega el invierno está puesto en la provincia de Buenos Aires», con lo cual ese sector tendrá que analizarse con la llegada del invierno, con el estricto cumplimiento de protocolos de seguridad.
Por último dijo que «existen presiones con demasiados intereses mezquinos por algunos sectores, pero también es cierto que hay pequeños trabajadores de la economía informal o de pequeños emprendimientos que están necesitados de recuperar algún tipo de actividad» e hizo un paréntesis para destacar a los que viven de «la changa, el jardinero, el plomero… aquel que hoy está sin trabajar».
Allí diferenció y anticipó que «en el interior lo van resolviendo los intendentes con habilitaciones de 1 o 2 por día para poder trabajar en alguna cuestión muy específica, esto en el interior se puede controlar y en el Conurbano es incontrolable», por lo se deduce que llevará otros tiempos.
Por último señaló que «si bien es cierto que Nación está tomando medidas como la ampliación de la AUH, el IFE, nada alcanza sobre todo cuando hay una inescrupulosidad muy grande por parte de los intermediarios de los alimentos, sea fruta, verdura, carne que hemos visto que han aumentado de una manera totalmente inconsciente y perversa».
«Todos sabemos que no hay un peso, que la gente está sin trabajar y además cargarle encima eso –el aumento de los alimentos- se hace una cuestión inmoral por parte de ésta gente» finalizó.