Trabajadores estatales de la provincia de Santa Fe criticaron el cronograma extendido de pagos de salarios que estableció el gobierno de Omar Perotti, que justificó el plan de abono en el «importante deficit» con que encontró las cuentas públicas.
El ministro de Gestión Pública, Rubén Michlig, dijo que “el cronograma no será para siempre, pero se ajusta a las necesidades de este mes”. En el mismo sentido, fuentes del Frente de Todos recalcaron que “fue un cronograma muy estudiado en función de los recursos que tiene la provincia”, y que “no era lo deseado” pero es necesario para “terminar con el endeudamiento para gastos corrientes”.
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Unas frases que fueron totalmente rechazadas por Sonia Alesso, dirigente de Amsafé, quien advirtió que hay «malestar» entre los docentes por lo que sucede y que no se descartan medidas de fuerza. La representante sindical estableció que “hemos hecho una notificación rechazando el cronograma de pago y pidiendo que se respete. Se está incumpliendo con la ley” y apuntó: «Esto pasó con los jubilados y ahora con los activos. Hay un malestar de la docencia y es fundamental que se corrija”.
Esta situación generó además que ATE realice una manifestación a la gobernación pidiendo que Perotti de marcha atrás con la forma en que se pagaran salarios. “Venimos a rechazar e impugnar el cronograma de pago del gobernador Perotti para los empleados públicos”, sostuvo el dirigente de los docentes rosarinos, Gustavo Terés, y agregó que “ésta es una definición de una política de ajuste”.
