La Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la provincia de Santa Fe (Festram) confirmó su decisión de llevar adelante el próximo miércoles 26 y jueves 27 un paro por 48 horas para reclamar una reapertura de la negociación paritaria, luego de haber rechazado la propuesta de un bono de 3000 pesos. Según confirmaron desde la Federación, la medida se llevará adelante sin concurrencia a los lugares de trabajo, priorizando el mantenimiento de las guardias mínimas y el cumplimiento de los protocolos de emergencia, en el marco de la epidemia de coronavirus.
Los gremios municipales de la provincia exigen un inmediato retorno al diálogo con los intendentes y presidentes comunales, aguardando una propuesta superadora al bono de 3000 pesos, que fue rechazado de plano. También denunciaron que en la última reunión de la Comisión Paritaria los representantes de intendencias y comunas intentaron trasladar a la negociación la misma oferta que el Gobierno provincial impuso a sus agentes, pretendiendo “legitimarla” como una política salarial para el sector.
Además, de la pobreza de la oferta del bono, “tampoco hubo ninguna propuesta ni gestión para la actualización de las Asignaciones Familiares y apenas una promesa de consideración del Gobierno”. Desde la Festram añadieron que “asimismo resulta preocupante la falta de cumplimiento del pago del Bono COVID a los trabajadores esenciales y la ausencia de funcionamiento de los Comités Mixtos de Salud y Seguridad en el trabajo, cuya consecuencia es facilitar el contagio y la trasmisión del COVID entre los trabajadores y trabajadoras de Municipios y Comunas”.
Según informes del Estado Nacional, las asistencia financiera a la provincia fue de más de 32.000 millones de pesos (un incremento del 38% sobre la coparticipación recibida), de los que a su vez el Gobierno provincial giró a municipios y comunas más de 3.000 millones por encima de la coparticipación habitual, lo que implica un aumento del 150%, por lo que no hay justificaciones para rechazar la negociación salaria.
“No quedan dudas de quienes están pagando la crisis. Por lo expuesto anteriormente, es evidente que tras el ahorro generado como consecuencia de la caída del poder adquisitivo del salario, los intendentes y presidentes Comunales intentan trasladar el ajuste a los trabajadores y trabajadoras de nuestro sector”, concluyeron desde la Federación de municipales.