En medio de una tensa batalla entre las prepagas y el Gobierno, la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina continúa con su plan de lucha en vistas de alcanzar una recomposición salarial acorde a la inflación prevista y al nivel de exposición que ha sufrido el sector durante la pandemia.
Para visibilizar nuestro conflicto «estamos realizando manifestaciones en distintos puntos de la Ciudad y los realizarán durante toda la semana pero con vistas a que el viernes pueda quedar saldado el conflicto». De lo contrario y con la conciliación obligatoria vencida, los trabajadores pararán cuatro horas el día viernes, y la semana próxima lo harán por 24 horas y a nivel nacional, cuestión que se intenta evitar.
Este miércoles «comenzamos nuestro recorrido a las 14:00 hs en la puerta del Sanatorio Finochietto», informaron a través de un comunicado oficial donde apuntaron también que «llegarán hasta el Sanatorio Güemes» en compañía del secretario general del gremio, Héctor Daer.
En un contexto difícil para el sistema de salud, tanto público como privado, con profesionales agotados por la pandemia, aún con niveles de contagio muy altos, los representantes de los trabajadores sostienen que «sin salarios no hay salud».
En la disputa, las prepagas amenazan con recortar en un 30% los servicios, ya que el Gobierno se niega al aumento de los abonos, cuestión que está revisando por éstas horas, afín de destrabar la crisis.
En ese sentido, Claudio Moroni, ministro de Trabajo apura una autorización de aumento para un incremento en las cuotas de las prepagas y de los valores del PAMI, de modo de que pueda financiarse el aumento salarial cercano al 45% que solicita el sindicato de Sanidad para el personal de clínicas y sanatorios.