Pese a presiones de empresarios, el oficialismo piensa prorrogar la prohibición de despidos

El Gobierno por estos días evalúa prorrogar la prohibición de despidos pese a las presisones del sector empresario, que esgrime baja de recaudación, por la cuarentena, y ya prevé una ola de cierres de emprendimientos sino puede achicar personal.

Para los ejecutivos, nucleados en la UIA, la Cámara de Comercio (CAC) y la Cámara de la Construcción (Camarco), no son suficientes las medidas oficiales, como el programa ATP para abonar salarios, o planes de la AFIP así como también los créditos, e insisten en la desregularización para echar gente.

No son pocos los que ha indicado que «si prorrogan despidos, van a lograr que muchas empresas vayan a convocatoria de acreedores y negocien con empleados la salida de las suspensiones y reducciones de turno». Pero los planes del Gobierno, en anuencia con los gremios, son diferentes: hay una apuesta a la intervención del Estado en este punto, con plena consciencia de que más trabajadores en la calle y sin ingreso aumentará la conflictividad social y ayudará a que la economía continúe cayendo.

Por eso, ya se le dio continuidad a la doble indemnización hasta fin de 2020 y en principio la imposibilidad de despedir se extenderá «por lo menos hasta septiembre», apuntan en el equipo económico del Frente de Todos aunque hay chances de que se llegue a fin de año.

Los datos preocupan al oficialismo: el Ministerio de Trabajo y la AFIP establecieron que, en los primeros cuatro meses, ya hubo 300.000 empleos registrados menos y cerraron (o se pasaron a la informalidad) más de 18.000 empresas en abril y mayo.

Por eso, si el números de contagios de Coronavirus continúa creciendo de forma moderada y sobre todo en el AMBA, la Casa Rosada planea autorizar distintas reaperturas de actividades en pos de recuperar levemente la economía, siempre con los protocolos sanitarios correspondientes.

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De hecho, ya existe un principio de acuerdo en la Ciudad para que empresas y comercios no esenciales, que tuvieron que cerrar el pasado 1 de julio, vuelvan al funcionamiento en una primera etapa. Mientras que en una segunda etapa, volverían a abrir locales de indumentaria y calzado, es decir 19 mil emprendimientos. Las galerías comerciales seguirían el mismo camino: reapertura bajo protocolo sanitario estricto.

En Provincia, Kicillof todavía no pretende realizar anuncios pese a las reuniones que mantuvo con distintas cámaras empresarias: la situación en territorio bonaerense es dispar, con municipios con varios contagios y otros con cierta reapertura y el virus controlado. La reunión en las próximas horas con jefes comunales, el jefe de Estado y su par de Ciudad será clave para el futuro de compañías y emprendimientos.