El anuncio de la empresa Genneia, que deja de operar las centrales térmicas de Gobernador Costa y Río Mayo, que proveen de energía a esas localidades de Chubut, tendrá como consecuencia un servicio menos eficiente y la incertidumbre por decenas de fuentes de trabajo.
El Sindicato de Luz y Fuerza de la Patagonia, que conduce Héctor González, ya expresó su preocupación al respecto:
“Los trabajadores de ambas centrales ven peligrar su fuente laboral, ya que nada se ha resuelto sobre su continuidad y sobre la sustentabilidad del servicio”, señaló el Secretario General del gremio. Vale recordar que ambas centrales son propiedad de la Provincia pero se encuentran concesionadas.
En octubre del año pasado se firmó un acuerdo de traspaso total a la Provincia del Chubut, sujeto al cumplimiento de una serie de condiciones que debían resolverse antes del 28 de febrero de 2019, fecha fijada para la efectivización del traspaso.
Pocos días antes de esa fecha, el Ente Regulador de Servicios Públicos del Chubut (ENRE) emitió una resolución mediante la cual postergó por 60 días el traspaso y solicitó a ambas partes la entrega de información necesaria para corroborar que estuviesen cumplidas las condiciones para la aprobación de la entrega anticipada.
“Estamos muy preocupados por los chubutenses que viven allí, quienes pueden ver seriamente afectada la prestación de un servicio básico como la energía eléctrica. En octubre del año pasado se pactaron una serie de condiciones que debían cumplirse, pero hasta ahora no se han cumplido”, dijo González, quien alertó a la comunidad sobre el problema de aprovisionamiento energético que se cierne sobre el interior provincial.
Las centrales de generación operadas por Genneia se encontrarían en una situación de funcionamiento precario ya que no se habrían cumplido los mantenimientos debidos, por lo que el riesgo de salida de servicio es una posibilidad que inquieta seriamente a las autoridades y vecinos de estas diez comunas de Chubut.
La central de Costa genera también para San Martín, Río Pico, Atilio Viglione y Tecka. Mientras que Río Mayo genera para Río Senguer, Lago Blanco, Aldea Beleiro y Ricardo Rojas.
“Esto ya pasó cuando las centrales dejaron de operar hace un tiempo, ocasión en la cual, de manera cuanto menos desprolija, el Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos contrató motores de generación a la empresa Juan F. Seco para reemplazar los de Genneia por su defectuoso funcionamiento. Sabemos, por lo que nos cuentan nuestros afiliados, que los equipos están en un estado lamentable y los hacen andar a fuerza de oficio y experiencia. Pero nadie les dice qué va a pasar con su trabajo y Genneia se va a fin de mes”, alertó González.
Cuando se constituyó el ENRE, en febrero pasado, sus autoridades se encontramos con que Genneia estaba a punto de abandonar la operación de las dos centrales con un lógico colapso del sistema. Fue así que de inmediato, el ENRE emitió una resolución prorrogando la entrega y solicitando información precisa para convalidar el traspaso. Hasta el momento, la empresa no ha entregado lo solicitado.
“Para los trabajadores de Luz y Fuerza que cumplen funciones para Genneia la situación es más incierta aún, ya que por su condición saben que las centrales son prácticamente inútiles y aparte podrían quedarse también sin trabajo”, asegura González.
“Es lamentable lo que está pasando, la empresa no ha hecho nada para devolver los equipos en buen estado. Y lo sabemos perfectamente porque son nuestros trabajadores los que hacen casi magia para que sigan andando. Genneia va a devolverlos sin mantenimiento y la Provincia, o sea todos nosotros, otra vez vamos a tener que pagar por costosas reparaciones que tendría que haber hecho la empresa”.
Respecto a los trabajadores, González señaló que son 18 y “no saben qué va a pasar con ellos. En Legislatura no hay ningún proyecto para resolver la situación. Genneia se va a fin de mes y podría no haber luz en toda esa zona. Al sindicato le preocupa mucho esta situación y que no se vislumbre una solución en los dos aspectos: garantizar un servicio público y evitar la pérdida de empleos”.