Dante Sica, el ministro de Producción y Trabajo, defendió el pacto entre la Unión Europea y el Mercosur y expresó que “abrir el comercio implica abrir las inversiones: más empleo, más trabajo. A su vez, también los productos europeos podrán ingresar a nuestro país, trayendo beneficios para el consumidor: una oferta más amplia a precios más competitivos. Es un salto de calidad institucional, estamos adoptando reglas de juego ‘world class’”.
Para Sica, no hay duda. El tratado de libre comercio que se acordó el viernes pasado entre el bloque europeo y el sudamericano, integrado por Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, es “un hecho histórico”. “Ahora tenemos acuerdos con el 30 por ciento del PBI mundial. Es una reforma estructural y nos abre una ventana de oportunidades y desafíos importantes”, argumentó el funcionario.
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El funcionario, quien formó parte de la delegación argentina que viajó a la sede central de la UE, en Bélgica, continuó brindando detalles del convenio. “Vamos a poder acceder con nuestros productos a un mercado de más de 400 millones de habitantes de alto poder adquisitivo. Y no solo con nuestros productos alimenticios sino también con otros productos del sector industrial “, sostuvo.
“Este acuerdo fue el gran impulso que Mauricio (Macri) le dio desde que asumió su administración. Estuvo hasta último momento alineado con la negociación, haciendo reuniones con (Emmanuel) Macron y (Jair) Bolsonaro para tener el apoyo de Francia”, añadió el ministro.
Ante las críticas de la oposición que recibió el pacto, Sica dijo que “algunas declaraciones son producto de la impotencia o de la incapacidad de haber llevado adelante este acuerdo. La expresidenta (Cristina Kirchner) no tuvo la capacidad técnica ni la voluntad política para hacerlo, y eso nos llevó a que pasen 12 años sin moverse”, replicó
