El presidente, Alberto Fernández, recorrió la refinería de la empresa Raízen, en la localidad bonaerense de Dock Sud, partido de Avellaneda, donde participó de la inauguración de una planta de propelentes que demandó una inversión de 8 millones de dólares y mantuvo una reunión de trabajo con las autoridades de la firma quienes le detallaron el avance del plan para la Argentina.
En un contexto adverso de pandemia que multiplica sus casos todos los días, el presidente se muestra activo insistiendo en que la actividad económica no se volverá a parar como en el 2020 y las nuevas medidas restrictivas anunciadas desde el Ejecutivo apuntan al control de la nocturnidad, a evitar la presencialidad en el Estado y como “sugerencia” también en el privado, pero no prevén cierres para la industria.
Por el contrario, en plena campaña electoral, las expectativas están puestas en obtener la Ley de Modificación de Impuesto a las Ganancias para poder volcar al consumo unos 47 mil millones de pesos que se cree la gente destinará a compras de supermercado, indumentaria o materiales de construcción, entre otras cosas.
Por ese motivo, durante la recorrida, Fernández aprovechó para insistir nuevamente en la necesidad de “apuntalar la industria nacional y tener confianza en el país”. Para avanzar en ese sentido se mostró acompañado por el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, el secretario de Energía, Darío Martínez, y por el embajador de Argentina en Brasil, Daniel Scioli.
Los ejecutivos de la firma destacaron que “en producción y comercialización están 10 por ciento arriba respecto a marzo 2019” y que la planta que quedó inaugurada “es una de las primeras que se realizan dentro del marco del plan de inversiones por 715 millones de dólares para el período 2020/23, que fue anunciado cuando el presidente Fernández visitó la empresa el 13 de octubre pasado”.
Para el desarrollo de esas dependencias los titulares de Raízen contrataron más de 10 PyMES locales, con una dotación de alrededor de 100 empleados durante aproximadamente seis meses. La producción inicial de la unidad, de 14.000 toneladas por año, será destinada al mercado local y existen grandes oportunidades de exportar una parte relevante al mercado de Brasil.
Junto a las instalaciones inauguradas, la obra incluye la construcción de cuatro nuevas plantas de hidrotratamiento de naftas, de hidrotratamiento de gasoil, de producción de hidrógeno y de tratamiento de aguas. Además, evolucionan los proyectos de la nueva columna de destilación de última generación, y la incorporación de tecnología digital en procesos y nuevos equipamientos.
Por otro lado, los empresarios puntualizaron que entre 2020, y enero y febrero de 2021, junto con otros socios, inauguraron 40 estaciones de servicio Shell en distintos lugares del país, que generaron más de 400 nuevos empleos y una inversión de más de 40 millones dólares.