Mientras todos los productos de la canasta alimentaria siguen aumentando como resultado de la devaluación post electoral, el Gobierno intenta negociar con los proveedores del plan Productos Esenciales para que no remarquen los precios y puedan sostener el compromiso de congelamiento hasta noviembre, tal cual lo anunciado a fines de abril.
Según un análisis de la consultora Focus Market sobre más de 2000 productos en 912 puntos de venta del país en la semana previa y posterior a la PASO, se confirmó que la quita del IVA a algunos productos básicos anunciada por el Gobierno como estrategia de “alivio” ante la disparada del dólar logra compensar parcialmente las subas de precio. Pero la medida podría resultar insuficiente ante la nueva tanda de aumentos que ya se anticipa desde la mayoría de los productores.
En el caso de los Productos Esenciales, un grupo de 64 productos dentro del programa Precios Cuidados, por el momento se mantienen los valores pactados en abril. Pero las empresas productoras le reclaman a la Secretaría de Comercio un reajuste de precios luego de la devaluación de más del 20% que siguió a la debacle electoral del oficialismo en las PASO. Ignacio Werner, titular de la cartera, ya comenzó a negociar con las empresas pero todavía sin acordar nuevos valores. Según el acuerdo original de congelamiento por seis meses, los precios debían mantenerse hasta fines de octubre.
El objetivo del Gobierno es cerrar un nuevo acuerdo que permita cumplir con el objetivo anunciado en abril, para lo que se argumentará que tras la quita del IVA, los márgenes empresariales no se verán substancialmente afectados. Fuentes oficiales reconocieron que se “está negociando” con cada una de las empresas cuánto les incidió la devaluación en los costos de sus productos para autorizar aumentos dentro de Precios Cuidados, pero el objetivo oficial apunta a mantener sin modificaciones los 64 componentes de Productos Esenciales.
Los productos alcanzados por la quita del IVA, que tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre, son pan, leche, aceite de girasol y mezcla, pastas secas, arroz, harina de trigo, polenta, rebozador y pan rallado, yerba mate, mate cocido y té, conservas de frutas, hortalizas y legumbres, yogures y azúcar.