El presidente Alberto Fernández volvió a confirmar los anuncios del día miércoles, oficializados en el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), tanto en las restricciones a la circulación ciudadana en el AMBA, como a los horarios de atención de los locales gastronómicos entre otras actividades culturales y recreativas.
Al mismo tiempo, ratificó la suspensión de las clases presenciales al menos hasta el próximo 30 de abril, más allá del recurso legal que realizó el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos y el contrapunto que mantuvieron en sus distintas presentaciones públicas.
El Presidente de la Nación justificó estas decisiones a partir del exponencial incremento de los contagios y de los fallecimientos en prácticamente todo el país, aunque también dio libertad de decisión a las distintas provincias –“somos una nación federal”-, con excepción del AMBA.
Por su parte Larreta, al tiempo que volvió a defender la presentación ante la Corte Suprema de Justicia para frenar la aplicación del DNU, en lo que hace a la presencia en las escuelas de alumnos y docentes, también reafirmó que el principal problema sanitario actual es producto que “el plan de vacunación que anunció el gobierno nacional no se cumplió”.
En cuanto a la atención sanitaria, el jefe de gobierno, afirmó que “es la ciudad la que recibe porcentualmente muchos habitantes de la provincia de Buenos Aires en los hospitales y sanatorios”. Incluso dio el dato que en la actualidad el 30% de las camas en CABA están ocupadas por ciudadanos bonaerenses.
