Según el más reciente índice de precios publicado por el Indec puede apreciarse que los alimentos básicos continúan aumentando por encima de la inflación promedio, en mayor proporción en provincia de Buenos Aires que en el resto del país. Si bien la cifra oficial del Índice de Precios al Consumidor para el mes de octubre se dará a conocer recién el jueves, consultoras privadas anticipan un aumento de 5,82% para los alimentos mientras que el promedio general sería de alrededor de 5%.
Durante el mes de septiembre, las estadísticas oficiales reconocen un aumento general de la inflación de 6,6% en el conurbano bonaerense mientras que los alimentos aumentaron un 7,3% (a nivel nacional la relación es de 6,5% y 7%, respectivamente). Sólo la región cuyana registró incrementos mayores: 6,8% general y 8,3% en alimentos.
Según la medición del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci), el valor de una canasta alimenticia base era de 6.144 pesos en diciembre del año pasado mientras que para octubre de este año la cifra llegó a 9.459 pesos, lo que implica un acumulado de 53,93%. En términos interanuales, comparando octubre con el mismo mes del año pasado, el incremento es de 57,45%, una cifra muy superior a la de la inflación en el mismo período. Durante el último mes los rubros alimenticios que más se encarecieron fueron frutas y verduras (12,50%) y carnes (9,93%). Durante 2018 los productos que más aumentaron fueron la harina de trigo (150%), huevos y papas (100%), pan (97%), fideos (83%) y yerba (72%).
Desde el Isepci consideraron: “Observamos que continúa un proceso que no se detiene. Hay un ajuste de los presupuestos domésticos, especialmente en los hogares de menores ingresos, mientras los precios en general y de los alimentos en particular, no ceden. En este marco, el gobierno reafirma su orientación económica lo que no augura ninguna perspectiva de mejora para la mayoría de las familias”.
Teniendo en cuenta que aún falta sumar los aumentos alimentarios para los meses de noviembre y diciembre es seguro que la suma anual de incrementos del rubro superará el 60%, una cifra que aventajará por más de 10 puntos a la inflación general y que da cuenta del fuertísimo impacto inflacionario en el bolsillo de los asalariados que deben dedicar buena parte de sus ingresos a cubrir necesidades alimenticias.