Mientras el Gobierno intenta hacer todo lo posible para que no existan aumentos de combustibles, como el retraso de un impuesto, con el objetivo de que no suba la inflación, las petroleras presionan para incrementar precios. Las compañías afirman que hay atrasos y solo existieron «pocas alzas en pos de que mantener la rentabilidad».
A su vez, fuentes de las compañías dejaron en claro que «sino existen precios correctos no podemos seguir produciendo». Con una devaluación que fue del 15% en lo que va del año, y con un litro de nafta atado al dólar, las petroleras esgrimen que habrá subas constantes de acá a fin de año.
Para morigerar los impactos que esto puede ocasionar, en pleno año electoral, desde el ministerio de Hacienda postergaron para el 1º de julio próximo la actualización automática de dos impuestos a los combustibles que se ajustan trimestralmente por el índice de precios al consumidor (IPC). El decreto 381, que fue publicado en el Boletín Oficial, estableció lo siguiente: «Las circunstancias actuales y la necesaria estabilización de los precios ameritan que la actualización realizada en el mes de abril de 2019 surta efectos a partir del 1° de julio de 2019 inclusive».
El Gobierno dilata aumentos de impuestos para que no suban los combustibles
Cabe destacar que el último domingo Axion decidió realizar una suba de 1,45% en los combustibles, al igual que YPF y Shell, que aumentaron 1,5%. Los precios quedaron así: Nafta Súper, a $42,64; Nafta Infinia, a $49,20; Diesel 500, a $40,24; e Infinia Diesel, a $47,10. Los nuevos precios de Raizen en la ciudad son: V-Power nafta $49.98; Super, $43.63; V-Power, diesel $47.98 y Formula Diesel, $42.23.