La Justicia ordenó a la Agencia Gubernamental de Control (AGC) que asegure el ingreso de inspectores del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires a la sede de un sindicato petrolero, denunciada por vecinos por haber realizado obras ilegales de refacción, sin las habilitaciones requeridas.
Se trata de la sede de la Federación del Petróleo, Gas y Biocombustible (FASPGyBio), de Avenida Caseros 715. El juez que ordenó el procedimiento es Guillermo Scheiber ante la denuncia de vecinos sobre obras irregulares que “invadieron el centro libre de manzana y atacaron directamente un edificio protegido”.
Según el magistrado, a cargo del juzgado en lo Contencioso, Administrativo y Tributario número 13, la AGC debe garantizar la inspección del inmueble, donde se denunciaron graves irregularidades ya desde el año 2010. El juez agregó que, en caso de ser necesario, se autorizaría el uso fuerza pública para confirmar si las obras fueron “antirreglamentarias”. En su resolución, el juez recordó que la propiedad fue clausurada en su momento pero que la medida fue “violada” y el gremio continuó con las obras.
La sentencia de Scheiber enumera numerosas irregularidades, entre las que se cuentan la ampliación y modificación de la fachada sin la “correspondiente documentación”, la presunta invasión del centro libre de manzana y la negativa del propietario del predio permitir las inspecciones. También responsabiliza al Gobierno de la ciudad por haber “omitido ejercer el poder de policía que le cabe en función de las competencias previstas en el Código de Edificación, respecto de las obras en contravención”.
Según la denuncia de los vecinos, en la sede del gremio que conduce Pedro Milla, se realizaron refacciones sin autorización del Gobierno porteño, sin visado previo y sin cartel de obra. Consultados por Ámbito Financiero, desde el gremio aseguraron que se trató de “obras de refacción internas, de un edificio antiguo y que no afectaron a vecinos”.