Según un reciente informe Concern Monitor, la crisis económica nacional llevó a que el 70% de los hogares se viera obligado a cambiar su forma de alimentación.
El informe fue realizado por Worldpanel Division, de Kantar, segmentando a la población por sus niveles de preocupación en cuanto la nutrición. También en el 70% de los hogares argentinos confesaron que se acabó la posibilidad de “darse un gusto” y se destaca la adquisición de productos saludables solo cuando están en oferta.
El sector más preocupado por la alimentación abarca al 29% y en general la estrategia ha sido la de recortar la cantidad o variedad de productos antes que pasar a marcas más baratas.
“Solo dos de cada 10 de estos hogares manifiestan que dejan de consumir productos light por su precio. Es un grupo de nivel socioeconómico alto y el peso de la canasta light es importante en el presupuesto total”, detalló Lorena Calviño, ejecutiva de Worldpanel Division. En este sector, las opciones “light” abarcan casi el 25% de la canasta familiar, contra un 16% de promedio en el mercado.
En el sector de los más preocupados por la alimentación se confirma un recorte en el consumo de derivados de las harinas, siendo las principales afectadas las pastas, tapas de empanadas, y premezclas. Calviño añadió: “Un alimento tan clásico en la mesa de los argentinos como las pastas, invita a la industria a pensar alternativas para no perder a este 29% que quiere cuidarse y que actúa en consecuencia”.