La CGT firmó un acuerdo con Salud para la provisión del «segundo medicamento más caro del mundo»

La Confederación General del Trabajo (CGT) confirmó un acuerdo con el Ministerio de Salud para el financiamiento de un fármaco específico para el tratamiento de la Atrofia Medular Espinal, que es el “segundo medicamento más caro del mundo”.

Desde la central obrera informaron que este martes fueron convocados por la ministra de la cartera sanitaria Carla Vizzotti para “la concreción de algo largamente reclamado” por la CGT, que se expresó en la resolución 21/2023 del Ministerio de Salud y la disposición 2/2023 de la Subsecretaria de Medicamentos e Información Estratégica de dicha cartera.

Por la central gremial participó del encuentro el secretario de Acción Social José Luis Lingeri. Además de Vizzotti, estuvieron presentes el superintendente de Servicios de Salud Daniel López y el gerente General de esa Superintendencia David Aruachan, junto a otros integrantes del gabinete de Salud.

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A partir de ahora la cartera sanitaria se hará cargo del financiamiento del medicamento Zolgensma, “el segundo medicamento más caro del mundo”, en el marco de un “esquema de compra tipo riesgo compartido mediante el cual se garantizará el acceso a la terapia génica para el tratamiento de la Atrofia Medular Espinal”. Este acuerdo regirá “independientemente del tipo de cobertura de las y los pacientes”.

Para avanzar con el nuevo diseño se confirmó la creación de una Comisión de Expertos que evaluara, de acuerdo con parámetros previamente definidos, “si corresponde la indicación que se analiza a fin de dar curso a la provisión del medicamento”. También se aclara que el acuerdo incluyo una reducción del precio del producto en cuestión “que paso de costar U$S 2.000.000 (+IVA) a costar U$S 1.300.000 (+IVA), generando un ahorro de U$S 700.000 por paciente tratado”. En el marco del encuentro se acordó un plan de pago a 5 años (con un desembolso inicial del 20% al momento de la provisión del producto) “que solo se concreta si el o la paciente en cuestión responde al tratamiento como se estipuló previamente”.

Desde la central obrera concluyeron remarcando que “esta decisión representa el resultado de arduas gestiones técnicas y políticas tendientes a lograr una mayor sustentabilidad de nuestro sistema de Obras Sociales y mejorar el acceso a estas tecnologías innovadoras del conjunto de los trabajadores y trabajadoras”, instancia que además constituye “el puntapié inicial para lograr un mayor financiamiento del estado nacional de este tipo de medicamentos de altísimo precio”.