La CGT dividida busca refugio en un Peronismo que tampoco encuentra la Unidad

En medio de una crisis económica que se agudiza, los gremios buscan dónde refugiarse políticamente pensando en cuál será en octubre del 2019, el peronismo que pueda dar garantías, de que en la próxima gestión de gobierno estará a la altura de las circunstancias en cuestión de las necesidades de trabajo y empleo.

En ese sentido, la cúpula de la CGT se orientó más hacia el peronismo racional y los gobernadores, en el intento de  tener injerencia a la hora de delinear el Presupuesto y consensuar cómo se van a gastar los escasos recursos disponibles en el Estado para el año próximo, año que tendrá como meta fiscal un déficit fiscal cero, cifra que se traducirá en un importante ajuste para los sectores trabajadores.

Desde el moyanismo se orientaron hacia el kirchnerismo, como el ala más dura y combativa, a fin de dar una embestida directa al gobierno, y sin descartar la candidatura de Cristina, generando algunas declaraciones provocativas como “el presidente tiene ganas de rajarse”.

En tanto, representantes del Movimiento Acción Sindical Argentino (MASA) como Omar Viviani, (Taxistas); Sergio Sassia, (Ferroviarios), Norberto Di Próspero, (Legislativos); Guillermo Moser, (Luz y Fuerza) y Osvaldo Iadarola de (Telecomunicaciones) se reunieron con el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, en la casa de la provincia, donde le brindaron su apoyo en medio de internas en el peronismo federal por su eventual candidatura para el año próximo que podría disputarse con la de Sergio Massa o Miguel Angel Pichetto.