Este jueves el gobernador bonaerense Axel Kicillof anunció un aumento salarial de 11% para el personal policial y del Servicio Penitenciario para los meses de octubre y noviembre, que se suma a los ya percibidos en marzo, julio y septiembre, totalizando una recomposición promedio de 46,5% en relación con diciembre del año anterior.
El gobernador también anticipó un incremento de la compensación por recargo de servicio, tanto para Policía (denominadas Cores) como para el personal del Servicio Penitenciario, que a partir de noviembre pasará a 180 pesos (un incremento de 4,5 veces desde septiembre del año pasado). El mandatario también aseguró que “si la inflación supera ese número, lo vamos a equiparar para que no pierdan salario” y recordó que al momento de su asunción las horas Cores “estaban congeladas en $40”.
Los anuncios fueron realizados durante un acto de entrega de patrulleros al municipio de Olavarría, en el que Kicillof estuvo acompañado por su ministro de Seguridad Sergio Berni, con quien luego recorrió las instalaciones de la Escuela de Policía Juan Vucetich descentralizada de ese distrito.
“Cuando asumimos, teníamos tierra arrasada. Hubo una caída en los salarios de todos los trabajadores del Estado en los 4 años anteriores. Fue del 20% para trabajadores administrativos, de salud y educación. Esa caída que en promedio fue del 20% tuvo su extremo en la policía: 25,7% cayó el salario real de los y las agentes”, recordó el mandatario bonaerense.
La Policía bonaerense volvería a los reclamos callejeros el próximo 11 de febrero
Y añadió: “Primero, equiparamos el salario de la policía de la provincia al de las fuerzas federales porque nuestros agentes no tienen por qué ganar menos. Ya este año llevamos dado incrementos salariales y ahora, por el movimiento de los precios, decidimos una nueva suba, cuyo alcance será de un 46,5% anual”.
Luego destacó que el dinero destinado a cada policía para la compra de uniformes durante la gestión de la exgobernadora María Eugenia Vidal era de menos de $1.200 y que su administración lo llevó a $5.000 “porque no puede ser que cada agente deba comprar su ropa y el Estado no lo reconozca”.
Y concluyó: “Uniforme, horas Cores, recuperación salarial, inversión en vehículos y equipamiento, formación e instrucción, pronto habrá un hospital para la Policía y un cambio de raíz en la profesionalización de la policía: Es así como vamos a recuperar el prestigio de nuestra fuerza policial. Es fácil hablar de seguridad, pero invertir en seguridad requiere tener determinadas prioridades”.