Jornada caliente con masiva movilización de movimientos sociales y fuertes declaraciones sindicales

Crece la tensión en la manifestación de movimientos sociales y diversas organizaciones políticas frente al Anses. Reclaman medidas urgentes ante la crisis económica y su impacto en las barriadas populares: aumento de emergencia de la asignación universal por hijo, las jubilaciones y las pensiones mínimas y los subsidios por los programas de empleo que quedaron rezagados tras la última corrida cambiaria que llevó el dólar a 40 pesos.

Por el lado de las organizaciones sociales, destaca la presencia de Barrios de Pie, la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y la Corriente Clasista y Combativa. También participan organizaciones como el Frente Popular Darío Santillán, el Movimiento Evita y numerosos partidos de izquierda. Están cortados carriles de la Avenida de Mayo y de la 9 de Julio y hay una importante presencia militante en el Obelisco, así como también gran cantidad de efectivos policiales que formaron un doble cordón de uniformados para evitar que se corte toda la 9 de Julio, instancia en la que se generaron algunas tensiones. La gran columna posiblemente siga hasta el Congreso. La protesta se replicó en diversas ciudades del interior.

Esteban “Gringo” Castro, secretario General de la CTEP, consideró que está “en riesgo la paz social” y explicó: “El Gobierno tiene que reflexionar sobre la situación que se vive en los barrios populares. Hay que tomar medidas de emergencia para que no haya un desborde social. Es desesperante porque literalmente hay hambre, nuestros pibes y pibas comen apenas una vez por día y gracias a los comedores comunitarios”.

Endurecimiento sindical

En un marco económico y social caldeado, diversos referentes gremiales salieron a confrontar con el oficialismo. El triunviro cegetista Carlos Schmid admitió la posibilidad de adelantar el paro fijado por la CGT para el próximo 25 de septiembre: “Nunca hay que descartar esto porque si hay los imprevistos que siempre tiene la historia, con represiones y con situaciones muy álgidas, esto indudablemente merece una revisión”.

Luego, en referencia a la degradación del Ministerio de Trabajo a Secretaría consideró que se relaciona con “la valoración que tiene el trabajo en una gestión económica como esta”. Y añadió: “Es mucho más que simbólico. Es una valoración donde el trabajo está por detrás del mercado, de las variables económicas, del ordenamiento de las cuentas. Es una concepción que tiene este gobierno que siempre ha tenido una orientación a favor del mercado que indudablemente le está dando la espalda”.

Hugo Moyano, por su parte, antes de ingresar a una reunión con intendentes y referentes sindicales realizó duras declaraciones contra el presidente Mauricio Macri: “Sinceramente, sin ofender, el hombre está desorientado, no sabe qué hacer y lo manejan. Es un instrumento del poder. No tiene noción de la responsabilidad que tiene. Es un hombre muy incómodo en la situación que está y, según me cuentan algunos allegados, tiene ganas de rajarse. Son niños bien y no están acostumbrados a que nadie les diga nada”.

Al terminar la actividad, durante una conferencia de prensa con la intendenta de la Matanza Verónica Magario, el camionero aclaró lo de que Macri “tiene ganas de rajarse” se lo transmitieron “hombres cercanos al Gobierno”. E insistió: “Una persona que es CEO no está acostumbrada a que le contradigan nada, por eso. A mí me lo comentaron, si es cierto habrá que preguntárselo a él. Nadie quiere que se vaya el Presidente ahora. Hay que echarlo con los votos en el 2019”.