El presidente Alberto Fernández, junto al Jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, y Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, anunció que se extiende la cuarentena hasta el 24 de mayo pero se flexibiliza para el interior, a criterio de cada mandatario, quienes podrán habilitar la reapertura de industrias y comercios.
Por tratarse de las zonas de mayor concentración de contagio, y que poseen gran densidad de población, la cuarentena no será tan elástica en el territorio porteño y en el Gran Buenos Aires, aunque cada intendente solicitará la habilitación de determinadas actividades que estudiará tanto el Gobernador como Jefatura de Gabinete de la Nación. No obstante, ambos titulares de los Ejecutivos adelantaron que los comercios de cercanía, de funcionamiento estrictamente barrial, podrán estar abiertos.
«Todos queremos que esto se normalice. Pero prefiero una fábrica vacía porque los empleados están en cuarentena y no porque están enfermos», expresó Fernandez, aclarando que su prioridad son las vidas: «Es una enfermedad muy contagiosa y no vamos a tirar todo el esfuerzo que hicimos por la borda. Nuestro objetivo es la salud de la gente».
«Toda la Argentina pasa a la fase 4 de la cuarentena salvo el AMBA», añadió y afirmó: «Con respecto a otros países del continente la situación de Argentina está bastante controlada».
En tanto el líder del Ejecutivo porteño comentó que «vamos a sumar algunas actividades en CABA con el mismo cuidado: actividades comerciales de forma gradual, los fines de semana los niños segmentando por documento van a poder salir con sus padres a dar una vuelta».
A su turno, Kicillof se quejó de los que «presionan» y «hacen lobby» para que haya mayores actividades liberadas. Acto seguido, adelantó que serán elevadas a la Nación propuestas para la apertura de «ramas de la producción» para evitar «problemas de desabastecimiento», pero luego de que sean aprobados protocolos de seguridad y que se garantice que la industria «provea su propio transporte» de los productos.
El dirigente del Frente de Todos insistió en que los protocolos sanitarios para la apertura de ciertas ramas de producción tienen que ser aprobados en las tres instancias: municipal, provincial y nacional.