En medio de la discusión por el margen de apertura que deberá regir en Argentina a partir de ésta nueva etapa de cuarentena “focalizada”, como la llaman, Estado de Alerta dialogó con Sebastián Expósito, Secretario Sectorial Nacional de Alimentación y Bebidas de la Unión General de Trabajadores de España, para conocer cómo se da en aquel país, esa transición, luego de la grave situación a la que los ha llevado la pandemia.
En ese sentido, Expósito explicó que “se ha comenzado el pasado lunes con algunas nuevas actividades pero evidentemente la vuelta al trabajo está siendo lenta y no han vuelto todos a la vez al ritmo de trabajo”, señaló y contó que “se han elaborado protocolos de vuelta al trabajo, se han elaborado guías a seguir para que la vuelta al trabajo sea segura, pero todo muy paulatino.”
Al respecto, destacó que “lo primero es la salud, si no hay salud no hay trabajo y si no hay trabajo no hay economía. La vuelta al trabajo debe ser escalonada, con garantías de seguridad y salud. Es verdad que la economía tiene su importancia, y es verdad que ningún país del mundo se va a escapar, ni siquiera las grandes potencias económicas y comerciales del mundo se van a escapar de sufrir un descalabro económico, eso está claro”, aseguró el dirigente que se encuentra en cuarentena desde el pasado 13 de marzo.
“Es verdad que existen presiones del poder económico que deja de ingresar, deja de facturar, y no les interesa, quieren garantizar sus inversiones, quieren garantizar la rentabilidad”, pero insistió en que “ahora no es momento de eso, es el momento de la solidaridad, es el momento del respeto al ser humano, es un momento de garantía de futuro y solamente se puede hacer con medidas muy claras, tanto económicas como de la salud”, concluyó el dirigente gremial alimenticio.
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En cuanto al desempleo señaló que “desde que la pandemia se declaró, hay diferentes formas de cómo se ha enfrentado la situación. En este momento está prohibido despedir a nadie, incluso hasta contratos temporales o precarios. El gobierno facilitó la posibilidad de que las empresas presentaran expedientes de regulación de empleo temporal o reducción de jornada –es como se denomina- de tal manera que las personas afectadas por el cierre de éstas actividades de éstas empresas pasarán a cobrar un subsidio por parte del gobierno equivalente al 70% de su base reguladora, es decir del salario bruto que percibe mensualmente” explicó.
También destacó especialmente a las “personas que cuidan de nosotros, me refiero a todo el personal sanitario que pone en riesgo sus vidas para poder salvar las nuestras, pero dentro de los trabajadores esenciales también destacó a los trabajadores de la agricultura, de la ganadería, y de la industria de la transformación de alimentos. El consumo en España está garantizado por más de las 500 mil personas que trabajan en la alimentación”, contó.
Pero por último hizo un paréntesis pues si bien la alimentación no ha dejado de ser una tarea esencial eso no quiere decir que la industria de la alimentación escape a la crisis pues, sobre todo en España está afectando a esa parte de la industria “el cierre de establecimientos públicos: restaurantes, confiterías, hoteles, bares, cafeterías… el turismo hace mucha palanca de fuerza en este sector. El turismo en España en este año 2020 ya no hay nada que hacer, es un año perdido” concluyó Expósito.
