La crisis hidrocarburífera comienza a mostrar su peor cara y el faltante de gasoil comienza a hacerse sentir con verdadera crudeza, sobre todo en el interior del país. Por ese motivo la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) advirtió que la escasez de gasoil pone “al borde del colapso” a las economías regionales y reclamó una “solución urgente” para impedir que la crisis impacte aún más en los precios.
De acuerdo a las declaraciones del presidente de la organización empresaria, Alfredo González, “Los reportes que nos llegan desde diferentes lugares del país son serios porque están afectando la operatividad de los productores”.
Esto conlleva a varias situaciones irregulares que hay que evitar, por ejemplo, que se instale un mercado “paralelo” de venta del combustible, aprovechando la desesperación de los productores que ya pagan sobreprecios y sufren los topes y las larguísimas esperas todos los días.
El comunicado de la cámara que agrupa a comercios y pymes de todo el país, advierte problemas crecientes para las próximas semanas y meses pese a que desde el Gobierno son optimistas en cuanto al abastecimiento de YPF en el mercado local.
El titular de CAME señaló también que las provincias del Norte son las más afectadas y que a las localidades limítrofes, llegan camiones del exterior para abastecerse de combustible barato. Esto hace que la mayoría de las provincias argentinas tengan muy bajo o nulo suministro de gasoil en las estaciones de servicio
A excepción de las provincias de la Patagonia, la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac) muestra a través de un informe que “entre el 25 de mayo y el 5 de junio, en 19 provincias del país se presentaban problemas de abastecimiento”.
De acuerdo a la encuesta del sector, el 29,6% de los transportistas debió esperar más de 12 horas para cargar combustible. A partir de las respuestas de conductores y propietarios de camiones de las pymes que integran las 43 cámaras de transporte nucleadas en Fadeeac, la entidad conformó un “semáforo virtual” para monitorear en tiempo real la disponibilidad de combustible en la Argentina y el rojo se impuso en 14 de las jurisdicciones y naranja en otras cinco.
Esto paralelamente hace subir los costos del transporte de carga, aumento que se trasladará a la inflación, el flagelo mayor de la macroeconomía, que por el momento no encuentra freno, pese a la batería de medidas aplicadas.
