El ministro de Producción Dante Sica podría desplazar de la cartera laboral al actual secretario Jorge Triaca, con el acuerdo de la Unión Industrial Argentina (UIA), que le cuestionar no haber podido contener a numerosos gremios que ya cerraron paritarias por encima del 40%.
Luego de que hace algunos meses el Gobierno de Mauricio Macri decidiera transformar al Ministerio de Trabajo en Secretaría bajo la órbita de la cartera de Producción, lo mismo que al ex Ministerio de Agroindustria encabezado por Luis Etchevehere, Sica pasó a ser uno de los ministros con mayor poder del Gabinete.
Su fluida relación con los empresarios lo transformó en el canal ideal para canalizar las preocupaciones de éstos sobre reclamos salariales de gremios como el de Camioneros que días atrás logró romper el techo de los 40 puntos anuales, a lo que luego se sumó Sanidad que acordó un histórico 45%, logrando no perder con la inflación pronosticada para este año.
Los empresarios, también sumidos en una crisis profunda producto del encarecimiento de los insumos importados por la devaluación, el aumento de los costos locales (especialmente gracias a las tarifas de servicios públicos) y la creciente retracción del mercado interno consideran que la variable de ajuste debe pasar por los salarios y opinan que aumentos que llegan a triplicar las paritarias acordadas a fin de año son insostenibles.
Además del escándalo de inicios de año en el que una empleada del entonces ministro Triaca denunciara gravísimas irregularidades en la intervención oficial del SOMU, a lo que luego se sumó la avalancha de críticas por la designación de numerosos familiares en el estado (lo que derivó en un decreto anti nepotismo a las apuradas), hoy el actual secretario de Trabajo se encuentra en el ojo de la tormenta por otro escándalo: un fraude millonario en el también intervenido gremio de vigiladores privados (UPSRA).
En ese contexto, el fortalecido ministro Sica podría aprovechar la situación para desplazar a Triaca y ubicar a un nuevo secretario de Trabajo que prometa ser más inflexible con las paritarias por las que los gremios van a seguir luchando cada vez más, al ritmo de la imparable disparada inflacionaria. También se habla de un posible desplazamiento de Etchevehere, también golpeado por el escándalo del bono cuando abandonó la Rural y cuestionado por el campo luego del incumplimiento oficial de la promesa de no volver a las retenciones a las exportaciones de productos agrarios.
