El SAFYB afirmó que los laboratorios no cumplen con la baja de precios de medicamentos

Marcelo Peretta, titular del Sindicato de Farmacéuticos y Bioquímicos, no cree en absoluto en la promesa de los laboratorios de reducir un 9% el precio de los medicamentos. De hecho, el representante gremial dijo que el ofrecimiento de los empresas al Ministro de Salud «genera poca expectativa, porque no es la primera vez que la industria farmacéutica promete bajas para luego no cumplir».

En conversación con Estado de Alerta apuntó que esta supuesta baja que ofrecen los laboratorios «es imposible de monitorear porque no hay Secretaría de Comercio ni estructura de control, porque se han desmantelado en el gobierno de Macri».

«La decisión de corregir el precio es del laboratorio y la cara la pone el farmacéutico, que le tiene que explicar a la gente por qué el precio no se bajó. Y estamos a merced de los laboratorios», añadió Peretta, quien también aseguró que no se puede hacer política con las empresas. De hecho, dijo que «si se quiere bajar los precios hay que relanzar la ley de genéricos, algo que creo que va a hacer Ginés González García».

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Para el sindicalista, en este marco, «hay que sancionar y multar a los médicos que suscriban marcas, no pueden hacerlo, y están estimulados por los laboratorios. Esto hizo mucho daño a la política sanitaria y al bolsillo de los trabajadores y a las finanzas de las obras sociales». Desde su visión, estableció que hay que estimular las «compras conjuntas de las obras sociales, de modo tal que licitando con anticipación se consigan precios más razonables. Los laboratorios tienen tasa de rentabilidad del 1100 por ciento».

No fue su única propuesta ya que piensa que «hay que impulsar la producción nacional con los 30 laboratorios públicos con las drogas esenciales». Y por último, opinó que se debe contar con una «redimensión del rol del farmacéutico, que ayude a conseguir el medicamento más barato, que acompañe, que ayude al cliente. Ahí se puede ahorrar hasta el 40% del precio. Esa es una política de medicamentos».