En medio de la recesión económica que sufre la Argentina, el sector manufacturero continúa en caída libre, alcanzando cifras alarmantes similares a las del año 2002.
Los bloques sectoriales que se ubican, en febrero de 2019, por debajo del nivel general de la industria son: productos alimenticios y bebidas (57,6%), edición e impresión (52,1%), productos de caucho y plástico (50,8%), productos textiles (43,2%), la industria automotriz (42,1%) y la industria metalmecánica excepto automotores (42,0%).
Así, de acuerdo a los datos del INDEC, la utilización de la capacidad instalada de la industria registró en febrero pasado el menor porcentaje para ese mes en los últimos 17 años, al ubicarse en el 58,5%.
El nivel registrado bajó desde el 64,4% de igual mes del año pasado, pero subió con relación al 56,2% registrado en enero.
La caída interanual en la utilización de la capacidad instalada, pero con suba respecto al mes anterior, se correspondió con lo que ocurrió en la producción industrial que en febrero cayó 8,5% respecto a igual mes del año pasado, pero subió 2,4% respecto al anterior.
Los distintos sectores que en febrero presentaron niveles de utilización de la capacidad instalada superiores al nivel general fueron: productos del tabaco, 72,9%; refinación del petróleo, 71,7%; papel y cartón, 71,7%; sustancias y productos químicos, 69,4%; metálicas básicas, 68,7%; productos minerales no metálicos, 67,5%.
Mientras que los bloques sectoriales que se ubicaron por debajo del nivel general de la industria son: productos alimenticios y bebidas, 57,6%; edición e impresión, 52,1%; productos de caucho y plástico, 50,8%; textiles, 43,2%; automotriz, 42,1%; y metalmecánica, excepto automotores, 42%.
Con cierto estupor, el sector industrial tuvo que escuchar del secretario de Política Económica, Miguel Braun, que «estamos empezando a salir de la recesión y este año veremos algo de recuperación”
Por el contrario desde la UIA, Guillermo Moretti, vicepresidente tercero declaró que «la situación de la industria es muy mala y denunció la pérdida de 200 mil puestos de trabajo registrados” que lejos de comenzar a reactivar está empeorando en los últimos meses.