Después del plan de ajuste anunciado hace quince días por el presidente ecuatoriano Lenin Moreno para reducir el déficit fiscal del país, los sindicatos organizados en la principal central obrera del país, el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) viene organizando movilizaciones semanales de protesta y ya convocó para una gran jornada de lucha para el próximo 20 se septiembre.
El paquete de recortes anunciado por Moreno incluye la eliminación de subsidios a la nafta súper, el despido de más de 1500 empleados públicos y la fusión o eliminación de diversos ministerios y dependencias estatales (de 27 ministerios se planea pasar a 20). El objetivo es llevar el actual déficit fiscal de 7% del PBI a 5,7%.
Inmediatamente después del anuncio de las medidas, el 22 de agosto, la FUT convocó a una movilización en repudio a las medidas, repudiando la eliminación de puestos laborales en el Estado y el aumento de los combustibles que impactará en la subida de los precios en general. La jornada de protestas se replicó el pasado miércoles 29 en distintas ciudades del país. Aunque por el momento las movilizaciones no son masivas, se apunta a confluir en una “gran movilización sindical” el próximo 20 de septiembre.
José Villavicencio, presidente de la FUT, aseguró que las movilizaciones continuarán si el gobierno no retrocede con estas políticas contra el pueblo: “Estamos predispuestos al diálogo, siempre que haya la voluntad política del Gobierno de cobrar impuestos a los grandes grupos económicos, a los que ahora se les están condonando multas, intereses y recargos“. A este respecto, los sindicatos repudian la reciente aprobación de una ley que condona deudas millonarias de algunos grupos empresarios del país.
