Este mediodía se llevó adelante un encuentro entre funcionarios del área Salud del Gobierno nacional, referentes de la Confederación General del Trabajo y directores médicos de las obras sociales sindicales en la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS), para avanzar en un plan de coordinación de trabajo para afrontar la crisis sanitaria derivada de la pandemia de coronavirus.
Participaron de la reunión el presidente de la SSS Eugenio Zanarini, el secretario de Calidad en Salud Arnaldo Medina (en nombre del ministro de Salud Ginés González García), el secretario de Acción Social de la CGT José Luis Lingeri y una veintena de directores médicos de las obras sociales sindicales, entre otros.
Las partes se comprometieron a elaborar un protocolo en el que se formaliza la oferta por parte de los gremios de sus hoteles en todo el país, para que puedan ser utilizados como espacios de aislamiento para personas sospechosas de haberse contagiado, descomprimiendo el sistema de salud. Para estos casos, se evaluó la posibilidad de que los sindicatos que pongan sus instalaciones hoteleras a disposición puedan recibir un aporte estatal que se utilizaría para la compra de insumos, más un posible aporte adicional de la Superintendencia de Seguros de Salud.
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El borrador del protocolo de acuerdo se analizaría este viernes por la mañana en una nueva reunión en el Ministerio de Salud, en el marco de un comité de crisis integrado por los participantes del encuentro de este jueves.
Uno de los principales temas tratados pasó por las estrategias a aplicar en caso de que se agudice la tasa de contagios en nuestro país. Desde Salud explicaron que se está haciendo un seguimiento de los casos confirmados y destacaron que se están tomando medidas para anticiparse a un eventual crecimiento de los afectados.
En cuanto a la necesaria provisión de insumos, se propuso que el Gobierno aplique una exención de impuestos aduaneros para facilitar la compra de respiradores y que se eliminen las actuales restricciones de homologación de los equipos.
Durante la reunión, desde la CGT se remarcó la necesidad de que el Gobierno habilite el pago de los 4800 millones de pesos adeudados a las obras sociales sindicales en concepto de reintegros (un tercio de la deuda total), que serían liberados este mes por la SSS, más otros $2200 millones que se aprobarían el próximo mes.