En las listas del Frente de Todos, a nivel nacional, finalmente el sindicalismo encontró una significativa participación, especialmente la Corriente Federal de Trabajadores, un grupo más cercano a la vicepresidenta, Cristina Kirchner donde el Bancario, Sergio Palazzo, logró asegurarse un lugar en la legislatura, ocupando el cuarto lugar en la lista del oficialismo para la Cámara Baja.
El histórico dirigente de la CTA, Hugo Yasky, Vanesa Siley de Judiciales y Walter Correa de Curtidores también irán por la renovación de las bancas próximas a vencer. Siley ocupará el séptimo lugar en la lista y Yasky el octavo lo que les asegura otros cuatro años de mandato. En tanto Correa logró el número 18 en la nómina, por lo que probablemente deba esperar. Algo similar será para Carlos Ortega del Secasfpi que ocupa la primera banca suplente de la lista.
Cierto es también que tendrán continuidad otros dirigentes sindicales que tienen mandatos hasta 2023, como es el caso de Facundo Moyano, de Peajes, Claudia Ormaechea y Carlos Cisneros, de Bancaria, María Rosa Martínez, de Corriente Federal, Carlos Ybrhain Ponce de Plásticos y Estela Hernández, de Comercio, éstos últimos representantes de San Luis y Chubut, respectivamente.
En cuanto a la ciudad de Buenos Aires, el actual Defensor del Pueblo porteño, Alejandro Amor, encabezará la lista de precandidatos a legisladores porteños del Frente de Todos. Su trayectoria se inició en el Sindicato Único de Trabajadores del Estado de la Ciudad de Buenos Aires (Sutecba), donde fue secretario gremial y luego fue secretario político en la Confederación de Obreros y Empleados Municipales de la Argentina (COEMA). En su larga relación con el sindicalismo, Amor también tuvo participación en la Confederación General del Trabajo y fue secretario general de las 62 Organizaciones Peronistas a nivel regional.
Quien tendrá su debut en la política con el aval del presidente Fernández será Maia Daer, abogada, hija del actual titular de Sanidad y secretario general de la CGT, que también integra la nómina para la legislatura de la Ciudad de Buenos Aires del Frente de Todos.
En las listas de la oposición no aparecen referentes gremiales, por lo menos de peso, por lo que la coalición de Gobierno es la que ha sabido contener al movimiento obrero en un momento difícil en el ámbito laboral, pero desde donde disparó la campaña electoral el FDT, con un fuerte acento en la “producción y el empleo”.
