Luego de una protesta en reclamo salarial, que incluía la obra social y la situación edilicia de escuelas que están en su 9º semana sin clases, Jorgelina Ruiz Díaz (55) y María Cristina Aguilar (52) murieron en Chubut este martes al volcar el automóvil en el que viajaban cuando volvían desde Rawson a Comodoro Rivadavia, tras las marchas de protesta por la crítica situación provincial que tiene a la provincia semiparalizada desde hace más de dos meses.
De inmediato, la responsabilidad por las dos muertes y las otras tres docentes heridas recayó sobre el gobierno, en el marco del “desastre” que atraviesa la provincia, al tiempo que llegaba el grupo GEOP a Rawson, ante la indignación de manifestantes frente a la Legislatura en llamas, por el fallecimiento de las maestras.
Así en la noche del martes el fuego de la Legislatura iluminó la noche de Rawson, y se escucharon los balazos que intentaban acallar lo que los estatales llaman “una catástrofe social”.
Al mismo tiempo, en todo Chubut salieron grupos de vecinos a las calles reclamando por lo que ocurre en la provincia, sumado a la tragedia de las maestras. En Comodoro Rivadavia, cientos de docentes ocuparon las calles con velas y antorchas para manifestarse en la zona del hospital donde se encuentran internadas las sobrevivientes. Las marchas se replicaron también en Trelew y Esquel.
En ese contexto, el gobernador Mario Arcioni intentaba aumentar su propio salario y el de la plana mayor de los funcionarios políticos en un 100%, mientras gremios de toda la provincia acampan reclamando que se les paguen sus sueldos, lo que fue echar más “nafta al fuego”.
El sueldo del gobernador y sus principales colaboradores ronda de 40 a 50 mil pesos mensuales. Pero ante las críticas, dieron a conocer que en Chubut los jueces cobran arriba de 600.000 pesos, y los legisladores están por encima de los 350.000 pesos, todo lo cual frente al reclamo de los trabajadores “pasa a ser un insulto en tiempos de crisis y ajuste”.
Este «combo» motivó para este miércoles a las 10 de la mañana una Marcha del Silencio “para que nos escuchen en toda la provincia”, dijeron los trabajadores en homenaje a las docentes muertas.
Las maestras fallecidas pertenecían a la Escuela 738 del Barrio San Cayetano, de Comodoro Rivadavia. Sus muertes provocaron un estallido de indignación en Chubut, provincia que en muchos sentidos viene incendiándose hace meses.
