Desde la secretaría de Trabajo de la provincia de Catamarca, y a través de Raúl Aguirre, el gobierno de Lucia Corpacci admitió su preocupación ante el cierre de empresas y el incremento de la desocupación, mientras la actividad económica no repunta.
Ante semejante cuadro de situación, desde el área que coordina Aguirre se está brindando asistencia a los trabajadores. Y no solo se brinda ayuda financiera sino, también, legal: “El proceso de cierre es tema bastante complejo y sensible porque se trata nada más y nada menos de trabajadores que quedan sin su fuente laboral, sin su ingreso principal como sustento de familia y que desgraciadamente no fueron pocos”, dijo el funcionario.
“En forma conjunta con el Ministerio de Producción y con las Agencias Territoriales de Empleo a cargo de Manzi (Mariano) buscamos hacer frente a esta difícil situación de quienes ven amenazada su continuidad laboral o directamente fueron despedidos”, añadió sobre las acciones de la administración provincial. Incluso se les ofrece a los trabajadores consejos sobre qué hacer con su indemnización y proyectos de emprendimientos individuales o colectivos, para que puedan generar un ingreso que permita la subsistencia.
Por otro lado, el funcionario estableció que si el seguro de desempleo finaliza «se le suma un plus, termina recibiendo un monto similar al salario mínimo vital y móvil. De esta forma se trata de contener a los trabajadores que desgraciadamente perdieron su fuente de laboral”.
A su vez, cuando una empresa baja las persiana, la administración provincial pone en marcha un programa de reactivación productiva, según comentó Aguirre: “Lo que estamos haciendo con estas empresas que cerraron o incluso algunas que despidieron a grupo de trabajadores, por ejemplo de Finpack, Alpargatas, Longvie, 12 de Octubre, a través de un pedido de la empresa fundamentando la situación real o la decisión de realizar despidos, la Agencia tramita en Nación el programa de reactivación productiva».
