Este miércoles 7 de agosto la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) elegirá autoridades nacionales, de 24 Consejos directivos provinciales y 180 seccionales. Se estima que hay 310 mil afiliados en condiciones de votar, lo que ubica al gremio entre uno de los cinco más grandes del país. Debido a tensiones entre la lista oficialista y la principal opositora y a cuestionamientos sobre los padrones, se habilitó la intervención de la Secretaría de Trabajo (dependiente del Ministerio de Producción) en el proceso electoral.
El actual Secretario General de ATE es Hugo “Cachorro” Godoy, quien busca su reelección al frente del principal gremio de los estatales, un claro referente de lucha durante la gestión Cambiemos. Desde la oposición se le reclama sus dificultades para sumarse en tiempo y forma a iniciativas masivas de resistencia tales como la Marcha Federal o el 21F. Tanto la lista oficialista como la principal opositora, la Verde y Blanca encabezada por el titular de ATE Capital, Daniel “Tano” Catalano, ya expresaron su apoyo a los candidatos del Frente de Todos, Alberto Fernández y la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El jueves de la semana pasada, la lista oficialista Verde ANUSATE cerró su campaña en en el microestadio Malvinas Argentinas de Argentinos Juniors, con un acto multitudinario, en el que Godoy planteó “Hace cuatro años nos convocamos a reinventar ATE bajo la consigna ‘ATE es de los trabajadores, gobierne quien gobierne’. Este 7 de agosto decimos que ‘con los trabajadores y las trabajadoras un Estado popular y democrático es posible y necesario’, y lo vamos a construir, no solo para echar a un Gobierno que empobreció a nuestro pueblo, sino también para que cambien la política”.
Catalano, por su parte, denunció que, pese a la masividad de afiliados de ATE, “tenemos un sindicato rico con trabajadores pobres”. Y agregó: “No puede ser que en todo estos años, con 310 mil afiliados y afiliadas, Godoy no haya podido firmar jamás una paritaria que ni siquiera empate a la inflación. A su vez, con más de 2 mil millones de pesos anuales de presupuesto, ni sostuvieron la lucha, ni brindaron servicios, beneficios o acción social en 35 años. El quinto sindicato más grande del país no entrega, ni siquiera, un kit escolar a los hijos de sus afiliados, y por eso lo queremos refundar. Saben que están en deuda con sus afiliados y ante la posibilidad de perder preparan un fraude obsceno”.
También presentan candidatos para la conducción nacional la lista Verde y púrpura, que lleva como candidatos a Pablo Micheli y a Cora Martínez; la Multicolor (dirigentes del FIT y del MST) y la Roja y Gris (del Nuevo MAS).
En la elección para la Ciudad de Buenos Aires hay empadronados más de 27 mil afiliados. Se anticipa un triunfo casi seguro de la Lista Verde y Blanca, otra vez con Catalano como primer candidato. Luego presentan candidatos la Celeste y Blanca, con Pablo Spataro (actual titular de la CTA-Autónoma Capital) y Carina Maloberti (delegada de ATE SENASA), y una novedosa lista porteña, la Blanca, Violeta y Granate, que lleva como principal candidato a Hernán “Vasco” Izurieta (delegado general de ATE-Trabajo) junto a Nadia Polanco (delegada general de la Junta de Promoción Social). También se presentan la lista Roja y Gris (Lerer-Cabral), la Verde Purpura (Berbere- Herrera) y la Multicolor (Almeida-Irrutia).
En la provincia de Buenos Aires, donde hay más de 37 mil afiliados, se anticipa un triunfo holgado de la Verde ANUSATE liderada por el actual titular Oscar “Colo” de Isasi. Sin embargo, la Verde y Blanca espera un crecimiento respecto de la elección de hace cuatro años.
Desde la Lista Verde y Blanca denunciaron que los padrones «son controlados por una empresa privada solventada con rescursos de las y los afiliados, algo sin precedentes en otros gremios» (el dueño de la empresa es a su vez presidente de la Junta Electoral Nacional e integrante de la lista oficialista) y que por este mecanismo se intenta «incluir a miles de afiliados truchos para garantizar un fraude», dejando al mismo tiempo fuera de los padrones a «miles de estatales activos y jubilados que podrían votar a otras listas».
También desde la Blanca, Violeta y Granate rechazaron la intervención de la Secretaría de Trabajo en el proceso electoral, al que consideraron el producto de una «interna irresponsable» entre las listas mayoritarias de ATE, que logró que «una interna de aparato cada vez más grave» haga que a un día de la votación no se encuentren a disposición los padrones correspondientes.