El Sindicato que nuclea a los supervisores de las empresas eléctricas dio a conocer un informe donde detalla con preocupación la situación en la que se encuentra la infraestructura en la generación y distribución. «Estamos trabajando fuertemente ante los cortes, solucionando los problemas que el servicio está presentando día a día», afirma Carlos Minucci, Secretario General de la Asociación del Personal Superior de Empresas de Energía (APSEE).
En este sentido el gremio especifica que el último viernes 8 a las 11:44 «salieron fuera de servicio las líneas de alta tensión que van de Central Dock Sud a Bosques, mientras una tercera línea ya se encontraba fuera de servicio, generando una emergencia en la generación de la central». Menos de tres horas después, «a las 14,03 sale de servicio la línea Embalse-Río Grande, se suma a las 14,19 la caída de la Central Genelba, a las 14,33 también sale la línea Agua de Cajón–Chocon Oeste, produciendo todos estos sucesos problemas de entrega de energía por más de 1300 Mw lo cual provocó que varias áreas de la Gran Buenos Aires, tuvieran problemas de corte».
Minucci entiende que las empresas quieren llevar a los trabajadores a un paro para tenerlo como excusa de los cortes en el suministro «nuestra responsabilidad asumida es solidaria con los usuarios, más allá de enfrentar la política laboral de las empresas hacia los trabajadores». «Pero si hubiéramos estado en conflicto gremial como ellos pretendían y siguen pretendiendo, o no hubiéramos asumido nuestra responsabilidad, hoy estaríamos en una crisis de magnitud», afirma Minucci. Y agrega: «Pero respetando nuestro compromiso con el usuario, los supervisores del área de Alta Tensión a las 15,03 normalizaron el servicio».
Finalmente Minucci aseguró que «estas empresas como el gobierno todo, tienen la decisión que marcó a fuego el ex Ministro de Energía Juan José Aranguren al manifestar que el servicio eléctrico es un negocio y que los privados no hacen beneficiencia. Por eso no les interesa el servicio, no les interesan los electrodependientes, no les interesan los hospitales sin luz y tantas otras situaciones». «Con ese panorama no vamos a pretender que no nos nieguen los derechos laborales, no obstante seguiremos atendiendo miles de sucesos que estamos enfrentando para paliar el mal momento que atraviesan los usuarios», concluyó.