En pleno debate por la polémica aplicación del nuevo uso de armas de fuego, sorprendió el operativo masivo de la policía frente a la manifestación de los movimientos sociales y el Polo obrero quienes reclamaban asistencia frente al Ministerio de Desarrollo Social mientras los uniformados les impedían el paso.
Una columna de manifestantes llegó desde el norte de la avenida 9 de Julio a la cartera que dirige Carolina Stanley pasado el mediodía del miércoles, mientras que otro grupo de movilizados vio interrumpida su marcha por la infantería de la Policía de la Ciudad en la esquina de la calle Lima y la avenida Juan de Garay, en el barrio de Constitución. Ante ese obstáculo, algunas personas movilizadas comenzaron a trasladarse en la línea C del subte que luego fue cerrada también.
Los dirigentes responsables de estas agrupaciones aseguraron que «no hubo un interlocutor con el que se pueda hablar» y por lo tanto se generó malestar pero permanecieron a la espera de alguna respuesta hasta que finalmente hubo algunos disturbios que terminaron con varios heridos.
Al respecto existe gran preocupación porque éste nuevo reglamento es por demás polémico y no existe consenso respecto de su uso. Organizaciones como el ILSED afirman que “es vago y que no incorpora pautas claras de actuación”, con lo cual existe un gran peligro de dar con este nuevo decreto “un aval innecesario y peligroso a la violencia institucional”.
Las agrupaciones acampan esta noche en el lugar para reclamar mejoras en los planes de empleo y un bono de fin de año. La manifestación, que tiene su réplica en varias provincias, es para reclamar mejoras en los planes de empleo y un bono de fin de año y se realiza bajo el lema «Por una Navidad sin hambre, contra el ajuste y por trabajo genuino».